La provincia avanza con la instalación de una planta procesadora de alimentos para el desarrollo ganadero. Funcionará en Río Gallegos y fue diseñada para operar con tecnología de última generación, con el objetivo de garantizar disponibilidad todo el año y potenciar la producción local.
En la ciudad santafesina de Rafaela, se construye una planta que tendrá impacto directo en la estepa santacruceña. El gobernador Claudio Vidal recorrió el predio junto al presidente de la Federación de Instituciones Agropecuarias Santacruceñas (FIAS), Enrique Jamieson, para interiorizarse sobre el funcionamiento del sistema que próximamente llegará a la provincia.
La planta, fabricada por la empresa Berandebi, está pensada para producir alimento balanceado para distintos tipos de ganado. Desde Santa Cruz se proyecta su instalación en un predio lindante al vivero del Consejo Agrario, con ingreso por la Ruta 3, en Río Gallegos. Se trata de una iniciativa con fuerte respaldo político, que busca reducir las brechas logísticas y operativas que actualmente enfrenta el sector rural.
“No solamente es para ganadería, también sirve para agricultura, porcinos… tiene una versatilidad enorme”, explicó Jamieson en diálogo con Radio Provincia. “Creo que tener una herramienta impulsora como una fábrica de balanceados en la zona es importante. Y hay que usarla”, agregó.
Tecnología al servicio del campo
El sistema está diseñado para funcionar con recetas programadas según las necesidades de cada categoría animal. La planta puede generar premezclas, hacer el picado y finalmente el pelletizado del alimento. Todo esto de forma automatizada, con balanzas, sensores y alarmas que permiten operarla de forma práctica y segura.
“Es una planta inteligente, de fácil operatividad. Produce lotes de 2.500 kilos según lo que programes, con muy baja necesidad de intervención humana. Vos pedís receta uno, receta dos, y va trabajando sola”, detalló Jamieson. El equipo de trabajo ya se encuentra finalizando la construcción de los silos, mientras la maquinaria principal está prácticamente lista.
Soberanía alimentaria y eficiencia
Más allá del avance tecnológico, el corazón de esta apuesta está en un cambio de paradigma. Para Jamieson, disponer de esta herramienta cerca del territorio es una invitación a revisar prácticas productivas. “Tenemos que cambiar un poco la cabeza y pensar en una suplementación estratégica. Hay momentos críticos del año, como la ovulación, la aparición o el destete, en los que suplementar mejora mucho la eficiencia”, señaló.
El acceso garantizado a alimento balanceado durante todo el año también podría extender la vida útil de las ovejas y mejorar su condición corporal, incluso en escenarios climáticos adversos. Y eso, en una región donde la producción se juega contra el clima, la distancia y la escasez de recursos, puede hacer la diferencia.
En palabras del propio gobernador, “con la llegada de esta planta procesadora de alimento balanceado, se abre un camino hacia adelante. Nos permitirá no solo fortalecer nuestra ganadería, sino también reactivar la tierra, sembrar pasturas y cosechar cosechas que nos ayuden a ser más autosuficientes y competitivos”.