Julio Grondona estuvo 35 años al frente de la AFA, tiempo en el que también ocupó un lugar importante dentro de la estructura de la FIFA. El dirigente, quien murió ejerciendo el cargo de presidente en julio de 2014, acumuló un sinfín de historias, algunas de color y otras oscuras.
Hoy, esas anécdotas siguen saliendo a la luz. Recientemente, su hijo Humberto, entrenador de Arsenal, recordó una que parecía olvidada: el día que su padre le ofreció a Inglaterra su voto como sede del Mundial a cambio de negociar las Islas Malvinas.
En una entrevista con el suplemento Enganche, del diario Página/12, Humbertito (tal como lo llaman) recordó varios aspectos de su padre, como el de su vinculación con la política. “Él se involucró en la causa de la Fragata Libertad, que estaba retenida en Ghana, un país que tenía problemas con FIFA y estaba suspendido. Menos Juan Pablo II y el alemán (Joseph Ratzinger, Benedicto XVI) a mi papá lo llamaron todos para pedirle ayuda”, reconoció el DT.
Al ser consultado por otra historia, Humbertito volvió a sacar a la luz el intento que hizo su padre de utilizar la causa de las Malvinas como moneda de cambio para dar un voto. “Para la elección de la sede del Mundial 2018, él votó a España y a Estados Unidos (finalmente, fue asignada a Rusia). Por el idioma y porque era más fácil de acceder para los argentinos. Pero Inglaterra vino a pedirle su voto. Él jamás iba a votar a los ingleses. Y en una de esas salidas mágicas que tenía le dijo que él le daba su voto, pero si ellos le pedían a su gobierno que se sentara a negociar Las Malvinas. Mi papá ofreció su voto a Inglaterra en un Mundial a cambio de negociar Malvinas. Era único”.
La historia la había contado el propio Grondona en 2011, luego de una de las votaciones para las sedes mundialistas: “Yo no he pedido nada en la vida. Pero a los ingleses sí lo hice. Les dije: ‘Vamos a acabar pronto. Tienen mi voto si me devuelven las Malvinas, que son nuestras’. Se quedaron muy tristes, y de eso no dijeron nada”.
