El Gobierno de Tierra del Fuego AIAS, cumpliendo con el mandato constitucional, elevó ante la Cámara Legislativa el proyecto de presupuesto para el ejercicio 2019. Independientemente de los datos duros que arrojan sus letras, tiene el mismo grado de volatilidad que un algodón empapado en alcohol o el dólar.
De hecho, la gobernadora de la Provincia, Rosana Bertone, expresa en los fundamentos que acompañan la misiva:
“Al momento de redactar el mensaje las variables económicas que inciden en la proyección presupuestaria se encuentran en un proceso de modificación constante y en forma diaria, por lo que se presupuesta que estará sujeto a cambios en los próximos días”.
Por normativa constitucional, el Poder Ejecutivo tiene plazo de entregar al parlamento el proyecto hasta cada 31 de agosto. A nivel nacional, el Gobierno tiene tiempo de entregarlo hasta el 15 de septiembre y muchos de los recursos con los que cuenta la provincia provienen de esa órbita. Todos los años la misma historia, el equipo económico de la administración provincial de turno elabora un proyecto adivinando cuáles serán las variables que proyectarán en Nación. Es por eso que hace años que escuchamos que quieren modificar ese punto de la Constitución Provincial.
Esta vez hay un componente adicional y es que al momento de la elevación del presente proyecto se carecen de pautas macrofiscales, como lo reconoce la mandataria provincial. Esas variables, como el índice de Precios al Consumidor o el tipo de cambio, afectan cada una de las proyecciones. Por eso, para elaborar el presupuesto tomaron “como parámetro inflacionario las metas de inflación establecidas por el propio Gobierno Nacional en junio de 2018, las estimaciones informadas a través del Relevamiento de Expectativas Macroeconómicas del BCRA y las proyecciones de organismos privados y Universidades Nacionales”.
Para el Ejercicio 2019, Gobierno estimó el cálculo de recursos corrientes y de capital en 31.097 millones 577 mil 639 pesos con 72 centavos, que incluye Administración Central y organismos descentralizados. Y la proyección de gastos asciende a la suma de 38.374 millones 775 mil 785 pesos con 65 centavos.
Por estos días se suceden reuniones en la Ciudad de Buenos Aires, de las que participan funcionarios nacionales y los ministros de economía de las distintas provincias para que ver de qué forman éstas absorben los 100.000 millones de pesos que busca reducir Nación para dar cumplimiento con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional; esto sucede a la vez que en Washington el equipo que conduce Nicolás Dujovne renegocia un adelanto de los desembolsos de ese crédito e incluso se especula con un ampliación del mismo.
El viernes, el Gobierno anunció la suspensión de la decisión de traspasar a las provincias la responsabilidad de financiar la tarifa social para el servicio eléctrico. Las variables cambian permanentemente.
La Provincia ya perdió varios recursos a partir de decisiones nacionales. Por ejemplo, la recaudación tributaria resultó afectada luego de la aprobación la Ley 1195 mediante la que el parlamento ratificó los términos del Consenso Fiscal. En ese sentido, la Agencia de Recaudación Fueguina estimó un sacrificio de 345 millones de pesos en 2019 luego de que se modificaran las alícuotas del Régimen General de Ingresos Brutos. Ese acuerdo se prevé que será modificado en el marco de las conversaciones entre Nación y las Provincia. Sin embargo esas reformas no afectarán al Régimen General de Ingresos Brutos, ya que en Nación consideran que es un impuesto distorsivo que afecta el ya golpeado sistema productivo, tal cual lo señalara el Instituto Argentino de Análisis Fiscal.
Por otro lado, Tierra del Fuego AIAS, perderá recursos al derogarse el Fondo Federal solidario, conocido como “fondo sojero” que fue eliminado mediante el DNU 756/18. Para 2018 esos recursos se habían estimado en 346 millones de pesos. Para 2019 la estimación era de 250 millones de pesos. El Gobierno provincial presentó un recurso de amparo ante la Corte Suprema de Justicia.
Sin dudas, el debate sobre el presupuesto -tanto provincial como nacional- es la discusión que se viene en el segundo semestre del año. Proyectos que sufrirán modificaciones sustanciales en el marco de los acuerdos que se logren -o impongan- y de la letra final que se apruebe -o no- en el parlamento fueguino y en el Congreso Nacional se desprende el programa de gobierno y la dirección política de los ejecutivos.
Luz Scarpati