En la misma semana en que la ministra de Seguridad Patricia Bullrich aseguró que “en Chubut no vive nadie, hay un millón de guanacos”, el Centro de Monitoreo de la Conservación del Ambiente de Naciones Unidas incorporó a esta especie, junto al tiburón escalandrún, el delfín nariz de botella y el chorlito de Magallanes, a la lista de la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS).
Según los nuevos datos de este Centro internacional, el 44% de las especies que figuran en el listado registran descensos de población y tres de cada cuatro especies están siendo afectadas por la pérdida del hábitat, la degradación y fragmentación.
La incorporación de las especies al listado de la CMS se dio en el marco de la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres que se llevó a cabo entre el 12 y 17 de febrero en Uzbekistán. Fue fruto de una iniciativa regional que incluyó a científicos y organizaciones de Argentina, Bolivia, Paraguay, Perú, Chile, Uruguay y Brasil.
“El riesgo de extinción es cada vez mayor para las especies migratorias a nivel mundial. Incluidas las que no figuran en las listas de la CMS”, explicó Ramiro Ovejero, investigador del Conicet y uno de los impulsores de la inclusión del guanaco.

Con la inclusión del guanaco a la lista de la CMS, Ovejero consideró que será posible fortalecer iniciativas de conservación fronteriza y recomendar pautas de manejo sustentable para la especie que habita a lo largo de la Cordillera de los Andes desde el altiplano hasta Tierra del Fuego.
Entre las principales amenazas para esta especie se cuenta “el deterioro de los pastizales a partir del uso ganadero por sobrepastoreo, junto con la aridez creciente provocada por el cambio climático, que provoca una falta de alimentos para esta especie”, y la cacería de ejemplares, detalló a Télam Andrés Novaro, director de Conservación Terrestre de WCS Argentina.
Fuente: Crónica