En una conversación franca y llena de detalles, el secretario de Estado de Ambiente de Santa Cruz, Mariano Bertinat, que está a punto de concluir su mandato, hizo un recorrido por los logros y desafíos al frente de esta cartera clave para la conservación del ambiente en la provincia y destacó con orgullo los avances alcanzados durante estos años en materia de cuidado ambiental.
“Desde 2015 hasta la fecha, logramos recuperar el control ambiental de las industrias en Santa Cruz con un programa de inspecciones y fiscalización sostenido en el tiempo”, señaló. “Antes, el trabajo de la Secretaría era más esporádico, por ahí sujeto a la disponibilidad de vehículos, de fondos y una de las cosas que hizo la Gobernadora, fue fortalecer el área de Ambiente para lograr sostener este ritmo de trabajo en el tiempo”. Bertinat remarcó la importancia del mismo, ya que “es una filosofía de trabajo que está diseñada y pensada para que se pueda mantener más allá de quien esté a cargo de la Secretaría, o a cargo del Gobierno”, y explica que, si bien les llevó años, lograr el rendimiento y mantenerlo en el tiempo, hoy realizan “entre 100 y 150 inspecciones mensuales de forma programática en frigoríficos, pesqueras y la industria petrolera”.
Este cambio significativo en el enfoque de la gestión ambiental también incluyó la implementación del programa “Ciudades Sostenibles”, diseñado para abordar de manera integral los problemas de manejo de residuos en los municipios de la provincia. “Cuando comenzamos en 2015, el reciclaje en Santa Cruz prácticamente no existía, pero hoy más del 50% de la población participa en algún programa de separación o reciclaje de residuos en su localidad”, destacó.
Uno de los logros más significativos fue la reducción de basurales a cielo abierto. “En 2015, más del 90% de los basurales eran a cielo abierto, y hoy tenemos vertederos controlados que evitan incendios y problemas ambientales”, subrayó.
En este marco, describió que el proyecto clave para mejorar la gestión de residuos en la zona norte, que abarca Caleta Olivia, Las Heras, Truncado, Jaramillo, Fitz Roy, Koluel Kaike y Cañón Seco, “es el financiado por el Banco Interamericano del Desarrollo (BID) y el Gobierno Nacional, con una inversión de 30 millones de dólares. Este proyecto incluye tres ecoparques en la zona norte y un centro sanitario regionalizado. “El intendente de Caleta Olivia, con apoyo del Sindicato de Petróleos liderado por José Lludgar, reinaugurará, en los próximos días, la planta de separación de residuos. Además, hemos entregado equipamiento para la gestión de residuos en Pico Truncado y Caleta Olivia, incluyendo reciclaje. Es decir, la próxima gestión tiene en la mano algunos proyectos ya funcionando y otros listos para empezar con el financiamiento adecuado”.
Teniendo en cuenta estos avances, y consultado sobre lo que considera que no debería descuidar la gestión que viene, remarcó que sería importante, “mantener los equipos de trabajo técnicos” y que los planes y los programas que funcionan bien, “continuarlos en el tiempo”.
Desafíos futuros: agua y biodiversidad
Bertinat enfatizó la importancia de abordar dos desafíos clave para el futuro de Santa Cruz: en primer lugar, destacó la necesidad de fortalecer la institucionalidad del agua en la provincia, debido a los desafíos planteados por el cambio climático y la escasez de agua en algunas regiones.
“Santa Cruz está ante un escenario muy complejo de cambio climático. Hay lugares de la provincia que están sufriendo las menores precipitaciones de nieve y de lluvia anuales y eso está comprometiendo mucho los usos del agua. Si nosotros no administramos mejor el agua, entonces la escasez va a generar impactos negativos en las actividades humanas y sobre los ecosistemas. Entonces, como habrá menos agua en algunas zonas, hay que usarla mejor”.
La provincia de Santa Cruz, a través de la Secretaría de Ambiente y en conjunto con el INTA, implementó en los últimos años un programa de estudio hidroambiental de casi todas las cuencas de la provincia. “Estudiamos los ríos, los caudales, la calidad de esas aguas. Lo que falta ahora es, a través de esa información, implementar planes directores de los recursos hídricos para poder utilizarlo de forma sostenible en el tiempo”.
El segundo desafío radica en fortalecer el trabajo en áreas protegidas y la conservación de la biodiversidad. “Santa Cruz cuenta con una riqueza en biodiversidad y en ecosistemas muy importante, pero al mismo tiempo son ecosistemas frágiles, vulnerables, que requieren de la mayor protección y gestión para que puedan prestar los servicios ecosistémicos”.
En una reflexión sobre la protección general del ambiente, Mariano resalta la importancia de expandir el enfoque de las áreas protegidas más allá de los bosques y glaciares tradicionalmente reconocidos. “Hay otros ecosistemas en la provincia que requieren de gestión y protección, como nuestras estepas, nuestras costas y fundamentalmente el mar, que hace mucho que está ahí, quizás un poco olvidado para nosotros. Santa Cruz es una provincia que tiene el litoral marítimo de los más grandes de la Argentina, sin embargo, su vida está más asociada a la tierra, que al mar”.
Bertinat propone ver la biodiversidad como un recurso estratégico para garantizar la sostenibilidad en la sociedad de Santa Cruz en lugar de considerarla una amenaza. Para lograr esto, sugiere la implementación de planes de manejo específicos para cada área protegida en Santa Cruz, “con reglas claras que permitan no solo la conservación estricta, sino también el disfrute de estos entornos naturales”.
La Educación Ambiental: de la teoría a la acción
Al hablar sobre la educación ambiental, Bertinat destacó la importancia de pasar del discurso a la acción y plantea que hubo un cambio en la percepción ambiental en la sociedad santacruceña. “Cada vez más personas, independientemente de su edad, entienden la importancia del ambiente, pero se necesita una transición de discursos a acciones concretas”. El desafío -señala- radica en proporcionar herramientas para que las personas puedan llevar a cabo prácticas ambientales de manera efectiva. “Falta el siguiente paso. Ya hay una batalla ganada, que es reconocer la importancia del ambiente. Ahora falta buscar los mecanismos para llevarlo a la acción”, enfatizó.
Mariano Bertinat: un legado de compromiso
Sobre sus sentimientos en relación con su gestión, Mariano expresó su gratitud “primero, con la Gobernadora, que nos confió una responsabilidad enorme, que es la Secretaría de Ambiente de Santa Cruz, en la confianza que nos dio para conducirla y en la fuerza que nos dio para llevarlo adelante, aun en los contextos económicos más difíciles”.
“Después, soy un agradecido del equipo, de la gente de la Secretaría. Acá hay un equipo que le mete pasión y corazón a las cosas. Que está convencida de que Ambiente es un organismo que tiene que crecer y han puesto todo para que así sea. Y también soy un agradecido de la gente, que si bien nosotros avanzamos en muchas cosas, hay muchas cosas que nos quedaron pendientes y la gente fue muy paciente con nosotros, nos esperó, sabía que si trabajamos bien, las soluciones iban a ir llegando. Mi balance es positivo, pero fundamentalmente es de agradecimiento con la sociedad de Santa Cruz que nos dio esta posibilidad”, concluyó.
Mariano Bertinat deja un legado de compromiso y trabajo incansable en pro del cuidado del ambiente en Santa Cruz. Su visión de un futuro sostenible, de la importancia de la sinergia entre las distintas áreas y su pasión por la protección de “nuestra casa común”, seguirán guiando sus esfuerzos, como él mismo expresó, “ya sea en el sector público, privado o en organizaciones sociales, voy a estar vinculado al ambiente hasta el último día de mi vida”.
Daniella Mancilla Provoste