El histórico parador ubicado entre los lagos Viedma y Argentino había cerrado sus puertas por la cuarentena. Este lunes volvió a atender, aunque el tránsito de la ruta no sea el habitual.
A unos 110 kilómetros de El Calafate, sobre la RN40, se ubica el histórico parador que el 17 de marzo también cerró sus puertas por la pandemia del coronavirus.
La muy buena temporada turística estaba en su etapa final. Aún quedaban varias semanas del pasar de vehículos particulares y colectivos, trayendo y llevando turistas entre El Calafate y El Chalten, y los que iban y venían por la ruta nacional 40.
El lugar es el único que presta servicios de comidas, bebidas y sanitarios en el triángulo de las localidades de El Calafate, Chalten y Tres Lagos.
Hacía más de una década que el parador no cerraba sus puertas, ni siquiera en la baja temporada. El 21 de marzo tuvo que cerrar.
Ahora, sus propietarios Laura y Pablo, decidieron la reapertura.
Ubicado a la costa del río La Leona, que une a los lagos Viedma y Argentino, es el típico parador patagónico en el que se atienden a turistas, lugareños, y es un alto siempre agradable para cargar el termo, tomar un café o pedir ayuda.
“Nunca cerramos en 13 años, ni siquiera un día. Fue muy triste, pero tuvimos que hacerlo por las medidas de seguridad”, comentó Paula.
El matrimonio y sus hijos pasan la cuarentena en la estancia La Estela, un establecimiento turístico de su propiedad que queda a 3 kilómetros del parador.
“Hace 70 días que estamos acá con nuestros dos hijos y mi suegro. Yo sólo he podido ir algunas veces a El Calafate a buscar víveres”, explicó Pablo.
Aquí en la estancia también hubo turistas varados en los primeros tiempos de la cuarentena.
La familia también quedó varada en la estancia. Recuerda Paula que ella estaba en El Calafate, donde sus dos niños asisten a la escuela. Al suspenderse las clases, la mujer decidió ir a pasar unos días a la estancia de la familia, a la que le quedaban dos semanas de recepción de turistas. No imaginó que por dos meses no podría volver a entrar a la localidad donde vive hace más de una década.
Aunque fueran de estancias de los alrededores y compartan la vida entre esos establecimientos y la localidad, no pudieron volver a El Calafate por disposición del municipio.
Honor a la historia
La zona en invierno se tranquiliza y el tránsito se limita al movimiento entre las localidades, sin turismo de ruta. Este año el tráfico es aún menor, pero el parador igual abrió sus puertas este lunes 1 de junio haciendo honor a sus 126 años de historia, que, con diferentes dueños y realidades, siempre fue el sitio esperado por los viajeros de a caballo y carretas, y más tarde con los rodados a motor. La historia cuenta que por aquí también pasaron Butch Cassidy y Sundance Kid luego de robar el banco de Londres en Río Gallegos, buscando descanso en su huida a Chile.
En enero del 2019 también pasó por la Leona el entonces presidente Mauricio Macri, haciendo un alto en el viaje a las represas que se construyen en el río Santa Cruz.
“Nos lleva a abrir esto que nunca habíamos cerrado en los 13 años que estamos en La leona, y que estos últimos días vemos pasar gente en la ruta. Además de un negocio, también vemos a La Leona como un lugar con una función social. No vemos por qué no estar abierto ahora que la cuarentena se empieza a flexibilizar”, contó el matrimonio a EL ROMPEHIELOS.
Para atender, el parador adoptó el protocolo que el municipio de El Calafate impone a restaurantes y confiterías, y con apertura restringidas que va de 08.30 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 hs, horarios preparados para el caso que se vuelvan a permitir circular las líneas regulares de colectivos.
Sergio Villegas
