Infobae – El secretario de Modernización Administrativa, Eduardo Martelli, figuró como accionista en 2016 de una sociedad de Panamá, dueña de propiedades en Punta del Este. Sin embargo Cristina Finances SA no fue incluida en su declaración jurada de ese año, presentada ante la Oficina Anticorrupción (OA).
La información se desprende de los nuevos documentos de Mossack Fonseca, compartidos por el diario alemán Süddeutsche Zeitung y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) con más de 100 periodistas miembros en todo el mundo. De Argentina, tuvieron acceso exclusivo Infobae, La Nación y Perfil.
Ante la consulta de ICIJ, el secretario de Modernización explicó que se trata de “una sociedad familiar de hace 45 años”, que recibió junto a sus dos hermanas “como herencia”, cuando falleció su madre en 2002. “En el reparto de bienes, Cristina Finances y la casa en Punta del Este que está a su nombre, quedaron para su hermana Andrea porque ella vive en Uruguay”, dijo.
Número dos del ministro Andrés Ibarra en esa cartera y hombre muy cercano a Mauricio Macri, Martelli recibió en 2010 un poder general para administrar esa offshore, junto a su hijo Nicolás, que entonces tenía 19 años. El estudio uruguayo de Juan Pedro Damiani que actuó de intermediario con Mossack Fonseca en Panamá, pidió que sea “lo más amplio posible” para dirigir la compañía e incluso para abrir una cuenta bancaria en el exterior “y todo lo que ello implica”.
Consultado por el equipo argentino del Consorcio sobre ese poder, explicó: “Cuando murió mi madre, quien se ocupó de mantener la casa fui yo. Yo trataba con Damiani y me ocupaba de pagar el fee anual. Hicimos un poder a mi nombre para poder pagar los impuestos. Lo puse a mi hijo porque me interesa que mis hijos se independicen y aprendan a manejar las cosas”.
Seis años después, el 6 de mayo de 2016, cuando Martelli ya era funcionario nacional, el 100% de las acciones de Cristina Finances pasaron a su nombre. La firma fue creada en 1961 y continúa activa.
Si bien Martelli sostuvo ante la consulta periodística que el único bien de Cristina Finances es esa “vieja casa de veraneo de 200 metros cuadrados” en el balneario uruguayo, al analizar los nuevos documentos de Mossack Fonseca, ICIJ detectó que Cristina Finances fue dueña de más propiedades.
Según una escritura del 14 de septiembre de 2005, Cristina Finances SA vendió seis terrenos vecinos vecinos con vista al mar en Punta Ballena, en el departamento de Maldonado, a la constructora uruguaya Safidal SA. La operación se concretó por una cifra millonaria por la ubicación privilegiada de los lotes.
En el entorno de Martelli confirmaron la información y explicaron que los lotes formaban parte del predio de la casa en el balneario uruguayo, y que una parte de ellos fue puesto a la venta. No precisaron quién debía tributar por esos ingresos, ni si lo hicieron.
Respecto de la propiedad del 100% de las acciones de Cristina Finances, Martelli aseguró que solo fue dueño “por un día” por “un error” de Damiani. “Mi hermana me dijo que cuando fueron a anotar las acciones de la sociedad, como era yo el que siempre trataba con ellos, se equivocaron y me anotaron a mí como accionista”, especuló. Por este motivo -aseguró el funcionario- no la incluyó en la declaración jurada que está obligado a presentar anualmente ante la OA al asumir como funcionario nacional.
El funcionario explicó al equipo argentino de ICIJ que para enmendar “este error” administrativo, al día siguiente, el 7 de mayo de 2016, le cedió la totalidad de las acciones a su hermana, Andrea, y aportó una copia en blanco y negro del certificado accionario como prueba.