Dante Sica, el nuevo Ministro de Producción de la Nación, tuvo su primer revés esta semana cuando Michel Temer, Presidente de Brasil, firmó el decreto que genera una serie de incentivos a la producción automotriz en el país vecino. La iniciativa debe contar con la aprobación del Congreso brasileño para que se torne efectiva.
Se sabe poco acerca de los detalles del Plan Rota, pero algunos puntos pueden tener un impacto negativo en la industria provincial ya golpeada por el avance de los precios de los insumos y por la retracción del mercado interno, fruto de la devaluación del dólar.
Uno de los ejes que se difundieron de este programa es la implementación de subsidios por 400 millones de dólares anuales a la producción de autos en ese país por los próximos 15 años. El otro es el compromiso del Gobierno brasileño a brindar beneficios fiscales para las inversiones relacionadas con la “Innovación Tecnológica” y la “Cadena Productiva”, que en buena parte estará destinada a las empresas autopartistas del país vecino.
Según un informe del Ministerio de Hacienda de la Nación, publicado en diciembre del año pasado en el sitio www.argentina.gob.ar, durante 2016 los autoestereos (autopartes) constituyen el tercer producto de mayor exportación de Tierra del Fuego AIAS y en su totalidad es destinado al mercado de Brasil. Acá es dónde el Plan Rota puede impactar en la frágil economía de la provincia más austral de la Argentina. De todos los autoestereos que exporta el país, el 84% es fabricado en la isla. Tema aparte son los dólares fresquitos que aportan a Argentina las exportaciones, aunque -hay que admitirlo- el aporte fueguino en ese sentido es casi nulo -o negativo, si consideramos la cantidad de dólares que demandan los insumos para la industria-, ya que los productos comercializados en el exterior fabricados en la Provincia representan el 0,2% del total Nacional.
De la variación interanual de los 10 principales productos de exportación entre 2015 y 2016, sólo dos mejoraron su desempeño: la merluza negra congelada (industria pesquera) y… las autopartes. Pero su futuro se presenta incierto. Hay un detalle que no hay que pasar por alto, ya que la fabricación de autopartes en la isla no es ni de cerca el eje del sector industrial, fuertemente motorizado por la producción de celulares y televisores, también bastardeados por la apertura comercial. Aunque se puede inferir a través de la última afirmación que el impacto podría ser menor, hay que tener presente que con una economía globalizada, el aleteo de una mariposa en Brasil puede provocar un temblor en Tierra del Fuego AIAS.
Luz Scarpati