Según testimonios de estancieros de la zona, los animales sufrieron las consecuencias del frío y el hambre. Aún no hay una evaluación de la cantidad de guanacos muertos, pero según el testimonio de una familia que transitó por la ruta entre El Cerrito y La Esperanza, la cifra superaba los ochenta ejemplares. Qué dicen los estancieros sobre el estado actual de la hacienda ovina.

La población de guanacos es una característica del paisaje santacruceño, al punto de ilustrar una de sus mejores postales bucólicas. Lamentablemente, muchas veces el viajero suele cruzarse con muchos de estos animales muertos tras ser impactados por camiones y vehículos. 

Pero en estos días lo que se aprecia es una cantidad de guanacos muertos a la vera de la ruta, e incluso en el interior de los campos del otro lado del alambrado. 

El propietario de una de las estancias de la zona atravesada por la Ruta N°40 entre Río Gallegos y El Calafate, dio su versión sobre las tristes imágenes de los guanacos muertos: “Lo que yo he visto yendo desde La Esperanza hacia Río Gallegos  son guanacos muertos por el invierno, fíjate, vos que la gran mayoría están en los faldeos o en lugares donde ha habido voladeros. Han puerto por hambre, o han quedado  enterrados o encajados en los voladeros”, interpreta un ganadero de la zona. 

“El guanaco es un animal muy débil,  para la nieve y para el frío.
No soporta mucho y es eso se quedan al lado de la ruta, con hambre y atrapados en los voladeros, no los pueden atravesar, y se quedan atascados”, afirmó el productor con una larga trayectoria en la actividad y que vivió varias nevadas en el campo, incluida la de 1995.

La foto tomada el miércoles 02 de octubre a unos 50 kilómetros del paraje La Esperanza en dirección a Río Gallegos.

El guanaco es una especie endémica en Santa Cruz con una población de más de dos millones de individuos. Esta cifra la convierte en un enemigo de la hacienda ovina en la lucha por el alimento. Recientemente, el gobierno nacional, mediante la Disposición 812/2024, autorizó a las provincias patagónicas a desarrollar planes de manejo y aprovechamiento del guanaco.

El estado de la hacienda ovina después de la nevada

En cuanto a si ya tienen un balance de las consecuencias que dejó la nevada puntualmente en el ganado ovino, los estancieros mencionan que aún no se puede contabilizar las pérdidas, “todavía es prematuro saber cuántos animales se perdieron, y en estos momentos se están realizando las esquilas preparto”, comentan. 

Mientras tanto, las entidades rurales están recabando información a los establecimientos asociados, para que brinden un informe detallado de las pérdidas. 

Sobre este punto, un estanciero estimó: “se cree que pérdida de animales no va a haber tanta, lo que sí va a haber es pérdida económica. Porque ha habido mucha inversión en compra de alimentos,  y mucha oveja que no va a parir o la lana no va a ser de buena calidad por el sufrimiento”, a raíz de las nevadas. 

Fuente: WINFO

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