Es la novela de nunca acabar.
Con su vuelta gloriosa desde la Juventus, con su éxodo inesperado a la liga china y con los puntos suspensivos a punto de completarse ahora para un nuevo -¿y definitivo?- retorno al primer hogar.
Carlos Tevez vuelve a ser el protagonista.
Este martes arrancó la pretemporada del Shanghai Shenhua y Carlitos no estuvo.
Desde el club chino, con el que tiene contrato hasta diciembre de 2018, esperan que el Apache se presente directamente en la ciudad española de Marbella el 4 de enero, para comenzar la puesta a punto.
Sin embargo, la intención del delantero de 33 años, campeón de la Copa Libertadores e Intercontinental 2003 con Boca, es retornar al club de sus amores.
Ese es el gran deseo de fin de año en el Mundo Boca.
Justo cuando el club se prepara para volver a la Libertadores, certamen que no gana desde 2007. Tevez, quien se encuentra de vacaciones en el país desde el 26 de noviembre, tiene que desvincularse del club asiático para luego acordar las condiciones de su regreso a Boca.
La cláusula de rescisión con el Shanghai Shenhua es de seis millones de dólares, aunque los chinos mantienen una importante deuda con el jugador que podría destrabar su salida.