Pinto un dragón, unto mis dedos en la miel

de flores luminosas. Pinto un dragón

azul y oro, dejo la pintura de labios

a un costado. Asciendo levemente.

Te busco en el aire.

Regreso. Pinto un dragón diminuto

hijito del sol. Con un pincel fino bordeo

su cola, con otro pruebo el color

para las llamas de su boca. Rojo fulgor.

Tu hija ha nacido.

 

de PUENTE AÉREO de Niní BERNARDELLO, 2001.

 

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