El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible firmó hoy con nueve provincias convenios de colaboración técnica para la implementación en el período 2014/2016 del Pago de Resultados del mecanismo REDD+, una herramienta de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático para reducir las emisiones causadas por la deforestación y la degradación de los bosques.
El ministro Cabandié firmó los convenios con las provincias de Buenos Aires, Chaco, Chubut, Entre Ríos, La Rioja, Misiones, Río Negro, Santa Cruz y Santa Fe.
Los recursos, provenientes del Fondo Verde del Clima, serán coejecutados por el Ministerio de Ambiente, junto a la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), por un período de seis años, informó un comunicado de la cartera de Ambiente.
Los convenios hacen a aportes del mecanismo REDD+ por resultados correspondientes al período 2014/2016, precisó el Ministerio.
Los convenios firmados con las jurisdicciones tienen como objetivo operativizar el programa de trabajo en territorio, luego de la Resolución 480/21 del COFEMA, donde se acordó la distribución geográfica de proyectos de manejo forestal sostenible a nivel de cuencas, planes integrales comunitarios, manejo de bosques con ganadería integrada y planes de prevención de incendios forestales, que se implementarán a través de este financiamiento en las distintas jurisdicciones.
El proyecto fue diseñado con base en los lineamientos técnicos estratégicos de la Ley n.° 26331, acordados en el COFEMA a través de la Resolución 360/18, y servirá para complementar las políticas de conservación de bosques nativos que se desarrollan en el marco de la ley de bosques.
La firma de los documentos se dio en el marco de la Asamblea Ordinaria n° 102 del Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA), realizada en la sede de la cartera ambiental de Nación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El mecanismo REDD+ es una herramienta de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) para reducir las emisiones provocadas por la deforestación y la degradación de los bosques en los países en desarrollo.
Su función es impulsar la conservación, la gestión sostenible de los bosques y el aumento de las reservas forestales de carbono en estos países con el fin de contribuir a los esfuerzos globales frente al cambio climático y sus consecuencias.
Fuente: Agencia Télam