En lo que amenaza ser un escándalo, el famoso Doc, el director y el guionista de la comedia de ciencia ficción más taquillera de la historia, cuentan los detalles del frustrado proyecto argentino-americano.
“Nos acusan de que somos un freno para las inversiones y un atraso para nuestro país. Somos hijos del peronismo, una década dorada en nuestro país, en donde el pueblo vivió los años más felices. Rechazamos cualquier acusación que diga que nosotros atrasamos la modernización de este país”, dijo el dirigente sindical Juan Carlos Schmid antes de ser internado en el hospital más cercano a Plaza de Mayo por un cuadro de hipertensión arterial producto de décadas de choripanes en actos masivos que no conducen a nada.
Schmid es uno de los integrantes del triunvirato de la central obrera -CGT- quien adelantó que el 25 de septiembre iniciarán un plan de lucha contra el Gobierno nacional en clara sintonía con la voluntad de la gente que se expresó en las PASO a favor de los piquetes, de los cortes de calles, de los encapuchados, los actos sindicales donde terminan a las trompadas entre ellos y, sobre todo, de la imposibilidad de ir a trabajar de manera pacífica. Lo sucedido esta semana dejó en evidencia lo que era vox populi en el mundillo del cine local: la suspension de la filmación de una nueva versión de “Volver al Futuro” en Argentina.
“Cuando le propuse a Robert Zemeckis filmar en Buenos Aires lo hice motivado por su extraordinaria arquitectura, que nos permite ir del presente al pasado en apenas unos metros de distancia. Lo que nunca me imaginé es que el proyecto se vería frustrado por gente que se aferra a vivir en otra época en la vida real”, relata del otro lado del teléfono Emmett Brown, el “Doc” de “Volver al Futuro”, quien estaba a punto de subirse a un avión para venir a filmar a nuestro país, el cual conoce muy bien luego de haber protagonizado una publicidad para una reconocida casa de electrodomésticos con el Delorean.
“El proyecto se frustró esta semana, cuando a minutos de firmar el contrato los protagonistas dijeron que prefieren quedarse en 1945”, explicó. “Esta nueva película está en línea con la saga que protagonizamos con Marty Mc Fly pero versión peronista, lo que nos asegura ahondar aún más en la ciencia ficción”, cuenta un entusiasmado Emmet del otro lado del teléfono, quien a pesar de los contratiempos, confía en que finalmente se encaminará el proyecto.
“El argumento gira en torno a un grupo de sindicalistas que viaja al 17 de Octubre de 1945 y se encuentra con la Plaza de Mayo desbordada de trabajadores que vivan a Juan Domingo Perón. El problema surgió cuando el guión especifica claramente que tienen que volver al 2017, a la misma Plaza, pero esta vez desbordada de activistas de izquierda fuera de control que arengan a las masas a ir contra los mismos sindicalistas que manejan grandes sumas de dinero, que nunca le llegan a los trabajadores que supuestamente dicen defender”.
