El paisaje de la Meseta La Torre, cerca de Río Turbio, ahora tiene un nuevo guardián: una estación nivológica que permitirá medir el agua en la nieve y anticipar lo que vendrá. Se trata de una de las 30 estaciones que se instalan en toda la provincia, gracias al trabajo conjunto del Ministerio de Energía y Minería de Santa Cruz y el Ejército Argentino.
El objetivo de estas estaciones es claro: cuidar el recurso más vital de la región, el agua. Con cada medición —de caudales, altura de los ríos, humedad y precipitaciones— se obtiene información clave para la planificación hídrica y para proyectar la gestión de este bien esencial.


La instalación de la nueva estación nivológica es parte del convenio con la Dirección Nacional de Sistemas de Monitoreo de Recursos Hídricos, que permitirá desplegar una red de monitoreo en todas las cuencas santacruceñas.
La medición de la nieve, en particular, tiene un valor incalculable. Cada cristal que se derrite se convierte en río, y cada río es vida que corre por la provincia. Estos datos ayudan no solo a prevenir posibles inundaciones o sequías, sino también a planificar la actividad productiva y a proteger los ecosistemas que dependen de este delicado equilibrio.

El desafío ahora es mantener este trabajo y seguir sumando estaciones. Porque, en Santa Cruz, la nieve no es solo belleza: es agua que viaja, que alimenta y que nos recuerda que estamos todos conectados por el mismo caudal.
