Luego de una tarde llena de rumores, marchas y contramarchas, el gobierno de Mauricio Macri confirmó que le aceptó la renuncia a Juan José Gómez Centurión al cargo de director general de Aduanas, y que el funcionario pasará a ocupar la vicepresidencia del Banco Nación.
Su lugar lo ocupará Diego Dávila, que hasta hoy era director general adjunto de la Aduana.
Un vocero del Presidente dijo a LA NACION que todo se definió cuando el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, llamó a Gómez Centurión para ofrecerle el segundo lugar en el Nación, que preside Javier González Fraga. “Gómez Centurión aceptó el nuevo cargo porque lo entendió como un ascenso jerárquico y es más acorde con su delicada situación de salud”, señaló una alta fuente de la Casa Rosada. Sin embargo, el ahora ex titular de Aduana es militar y ex veterano de Malvinas, sin experiencia en el mundo financiero. En ese contexto, lo más “natural” era ofrecerle la sucesión en la Aduana a Diego Dávila, que desde junio último era director adjunto del organismo que rige el comercio exterior. Ese mes, Macri firmó un decreto mediante el cual designó a Dávila como director adjunto de la Aduana para desarrollar un plan desburocratizador. Dávila había diseñado con Quintana un proyecto para desburocratizar varias áreas del Estado, como el Senasa y la Aduana. Gómez Centurión, para entonces, tenía fuertes problemas de salud, y en la gestión diaria lo había reemplazado su segundo, Pedro Chapar. La primera noticia de la renuncia surgió a primera hora de la tarde. Las versiones daban cuenta de una reunión entre el director ejecutivo de la AFIP, Alberto Abad; Gómez Centurión, y el propio Dávila. “No renuncié a mi cargo, aquí estoy en la Aduana”, dijo Gómez Centurión a LA NACION luego de los rumores y las confirmaciones extraoficiales. En el Gobierno afirmaron en un principio que el alejamiento sería por cansancio debido a la enfermedad, por la cual estuvo internado casi dos meses debido a una úlcera duodenal perforada. Otras fuentes de la Casa Rosada, sobre esa desmentida, señalaban: “Todo se está revisando. Es cierto que hay un conflicto”. Otra fuente de directa llegada a Macri y al jefe del Gabinete, Marcos Peña, señalaba: “Es posible que vaya al Banco Nacion”. Fuentes del Gabinete y del sector privado afirmaron que la situación en la Aduana era compleja porque convivían dos equipos del macrismo, enfrentados entre sí. En los últimos días, en la Casa Rosada, Chapar y Dávila intentaron limar asperezas en la gestión de los temas complejos de la Aduana.
Con la venia de Macri, Marcos Peña y Quintana se acordó avanzar en una lista de problemas que luego no fueron resueltos.
En la Casa Rosada no supieron informar si Chapar continuará en el cargo que ocupa o dará un paso al costado igual que Gómez Centurión.
En el ámbito del comercio exterior sostienen que Dávila no es un experto en temas aduaneros, pero que es un ejecutivo muy capaz y honesto, dos cualidades no menores a la hora de enfrentar a ciertos sectores en la Aduana.