El impacto del 2020 en la naturaleza de Santa Cruz: la ley 3692 que prohíbe crear áreas protegidas, el avance de dos mega represas chinas, y el desarme de una reserva natural.
La naturaleza de Santa Cruz está gravemente amenazada, quizás como nunca antes en la historia ambiental de la Patagonia Austral. Sin dudas, el año 2020 perdurará en nuestra memoria como un duro y fiel testigo de las consecuencias que nuestro maltrato ha ocasionado sobre los ambientes y las especies de plantas y animales con las que compartimos el planeta. En Santa Cruz, este año también será recordado por una gravísima amenaza, rara vez vista en el mundo e inédita para la Argentina: la des-protección de la naturaleza.
“El deshacer” la protección de la naturaleza, manifestado a través del desarme de la Reserva Natural Silvestre Patagonia, se suma al avance de las mega represas chinas que modificarán para siempre al río Santa Cruz, y que arriesgan la supervivencia de una especie única en el mundo; y a la prohibición por ley provincial 3.692 de crear nuevas áreas protegidas —con una prórroga en camino—, en una provincia con menos del 8% del territorio con alguna categoría legal de resguardo y carente de un sistema de áreas protegidas, y en un país comprometido internacionalmente a proteger el 20% de sus tierras y el 10% de su mar para el 2020 — ambas metas incumplidas. Hoy, Santa Cruz no sólo no protege la naturaleza: prohíbe por ley protegerla, y desarma áreas que ya han sido protegidas.
Las innegables crisis climática y ecológica, respaldadas por abrumadora evidencia científica, dieron a luz a grandes movimientos globales como el nuestro, XR Patagonia Austral, nacido en este rincón único de nuestro país. Somos jóvenes de las ciudades y los pueblos con una misión clara: salvar el planeta. Así de abarcativa y ambiciosa es nuestra lucha, y la damos porque nuestros y nuestras representantes continúan avanzando directo hacia al colapso, incentivando políticas en detrimento de los complejísimos sistemas naturales que soportan la vida, con alcances que ni siquiera terminamos de comprender.
La Secretaría de Ambiente de Santa Cruz, el Ministerio de Ambiente de la Nación, y la Administración de Parques Nacionales son las instituciones a quienes los argentinos y argentinas les confiamos el cuidado de las áreas naturales de Santa Cruz, una herramienta fundamental de la conservación en la que fuimos pioneros, y que hoy estamos viendo desarmar y desproteger.
Son estas instituciones las que deberían estar reaccionando con vehemencia ante estos graves atropellos sobre los ecosistemas, los paisajes, las especies que sustentan nuestra existencia, y que no tienen voz para defenderse ni reconocen esos límites jurisdiccionales inventados por los humanos. Graves atropellos, además, sobre nuestros derechos y sobre el planeta. Sin embargo, no existe ni una declaración sobre estas problemáticas de parte de quienes representan estas instituciones.
El año 2020 nos impulsó a unir fuerzas y prepararnos para un 2021 que podría ser aún peor. Por eso, ONGs y movimientos unidos aplicaremos una presión incansable para revertir estas crisis y generar un nuevo vínculo con la naturaleza. La mejor reacción es la acción. ¡Sumate! Nos vemos en las calles.
XR Patagonia Austral