Se espera la adhesión de las provincias del país que apliquen las medidas de eficiencia energética en las propiedades
La Secretaría de Energía creó el Registro Nacional del Programa de Etiquetado de Viviendas, que agrupará a los registros de etiquetas, etiquetadores y sus formadores, y además aprobó los modelos de convenios de adhesión para suscribir con las provincias y la Ciudad de Buenos Aires.
La medida se plasmó en la resolución 418/2023 publicada ayer en el Boletín Oficial, y complementa lo dispuesto en la resolución 5 del 6 de enero de este año, que con la creación del Pronev (Programa Nacional de Etiquetado de Viviendas) busca impulsar medidas de eficiencia energética en la construcción y refacción de inmuebles familiares, que representan más de la cuarta parte del consumo total de electricidad en todo el país.
En sus anexos, la norma define a la Etiqueta de Eficiencia Energética como un “documento técnico asociado a una vivienda” que indica su calificación con una escala de siete letras y colores, “que van desde el color verde vinculado a la letra A para los más eficientes, hasta el color rojo, vinculado a la letra G para los menos eficientes”.
“Estas categorías están asociadas a rangos de valores del IPE (Índice de Prestaciones Energéticas) que permite diagnosticar y cuantificar el requerimiento energético de las viviendas a partir de sus características técnicas”, dice la norma.
La etiqueta se emite a través de una herramienta online llamada AEV (Aplicativo Informático Nacional de Etiquetado de Vivienda), “que permite evaluar las prestaciones energéticas de una vivienda en cualquier lugar del país”, a partir del relevamiento y procesamiento de datos, para obtener la calificación correspondiente.
La AEV, especifica la resolución, “brinda un diagnóstico detallado de las características técnicas y del desempeño energético de una vivienda en su conjunto y de cada uno de sus componentes”, permitiendo “identificar los puntos críticos y, a partir de ello, evaluar posibles intervenciones de mejora de eficiencia energética, cuantificando el impacto de las mismas en términos de potenciales ahorros”.
A su vez, el registro nacional estará compuesto por los registros de Etiquetas de Viviendas, Etiquetadores de Viviendas y Formadores de Etiquetadores.
Cuando fue creado el Pronev, la Secretaría de Energía sostuvo que “la implementación de un sistema de etiquetado de eficiencia energética de viviendas constituye una herramienta de política pública de fundamental importancia, ya que permitirá cuantificar el requerimiento energético de las viviendas de todo el territorio nacional, de manera de poder compararlas entre sí bajo un criterio unificado”.
Las políticas tendientes a lograr estándares apropiados de eficiencia energética en las construcciones de viviendas se remontan al 2007, cuando se aprobaron los lineamientos del Programa Nacional de Uso Racional y Eficiente de la Energía (Pronuree).
Fuente: Agencia Télam