Con el antecedente de la ley que prohíbe la cría de salmónidos en aguas provinciales, la agenda legislativa fueguina incluye otro proyecto que hará historia: que Península Mitre sea área protegida.
Distintas Comisiones del Parlamento fueguino vienen tratando proyectos relacionados con la agenda ambiental. Uno de ellos ha sido elaborado y revisado de manera participativa por miembros de la sociedad civil y funcionarios del Gobierno provincial. El objetivo es declarar a Península Mitre área protegida con el fin de preservar sus valores naturales y culturales. Además, permitirá hacer un aprovechamiento sustentable de los recursos que ofrece.
Una de las legisladoras que acompaña este camino hace años es Laura Colazo, presidenta del bloque del Partido Verde (PV). Con una mirada comprometida, señala que este proyecto “no es de nadie en particular, sino que es de todo el pueblo de Tierra del Fuego y de muchísimas personas que a lo largo de estos 30 años vienen impulsándolo”.
“A mí me toca impulsarlo dentro del ámbito de la Legislatura. Así fue como acompañé la firma junto a la legisladora Myriam Martinez para que ingrese y tome nuevamente estado parlamentario”.
Desde su paso por el Concejo Deliberante de Río Grande, Colazo acompañó el proceso de formulación del proyecto junto a ONGs, especialistas y técnicos de la Secretaría de Ambiente de la provincia. A finales del 2020, el gobernador Gustavo Melella firmó el Decreto 1710 con el que se buscaba proteger el área de Península Mitre hasta tanto el Parlamento definiera una norma.
“Creo que el avance del decreto del poder ejecutivo fue importante, pero no es suficiente”, indicó la funcionaria. “Para que Península Mitre se transforme en un área protegida necesitamos una ley”.
Resta que se definan las fechas de llamado a reuniones, a cargo de la presidencia de la Comisión 3. Será la oportunidad para plantear, escuchar, debatir y definir los puntos que se llevarán al debate del plenario.
Para la legisladora, el camino del proyecto “fue un trabajo muy enriquecedor, porque se pudo actualizar la propuesta, mejorar y complementarla”. Desde su punto de vista “está casi listo para elaborar el dictamen. Veo un consenso respecto a la necesidad de aprobar la ley en todos los bloques políticos”.
El área que se busca proteger es uno de los pocos espacios naturales de Patagonia que resiste al avance de la acción humana, manteniendo sus paisajes casi prístinos. “Creo que lo que tiene de especial Península Mitre, es que puede ser el paradigma de un nuevo esquema de desarrollo”, puntualiza Colazo.
De hecho, el área de Península Mitre une a todos los núcleos poblacionales de la provincia: por el sur Ushuaia, que ya cuenta con toda la infraestructura y servicios turísticos, también Almanza, polo de la pesca artesanal, Río Grande es el principal lugar desde donde provienen la mayoría de los visitantes y Tolhuin, que se encuentra en el centro del área y es paso obligatorio para acceder tanto por el norte como por el sur.
Que sea protegida por ley, permitirá diseñar un plan de manejo, resolver la zonificación, pautar y definir accesos, qué actividades estarán habilitadas, cómo desarrollarlas y en qué sitios, entre otras acciones.
Tierra del Fuego tiene en las 300.000 hectáreas de tierra y 200.000 de mar de la Península Mitre un ecosistema que cumple un rol fundamental en la captación de C02 atmosférico, uno de los principales causantes del calentamiento global. Según el reciente Sexto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), es indiscutible que la influencia humana ha modificado el sistema climático. En Península Mitre, estas previsiones de la ONU encuentran un ecosistema que, gracias a la superficie ocupada por turba, funciona como una gran “aspiradora” de carbono.
Gestionando proyectos con temática “verde”
Desde el bloque del Partido Verde se han impulsado distintos proyectos que tienen un enfoque claro en la conservación. “Son proyectos que se enmarcan dentro de nuestra propuesta política, que es el desarrollo sostenible que queremos para nuestra provincia, que se dé en un marco de desarrollo de sustentabilidad ambiental, social y económica. En ese esquema, podemos ampliar la matriz económica generando y promoviendo una actividad como el turismo de naturaleza”, afirma la parlamentaria.
“El cambio climático es la principal amenaza que atraviesa la humanidad y es un desafío global, pero de acción local”, remarca Colazo. “Tenemos muchas fortalezas, por nuestra biodiversidad, por la superficie de bosques, de aguas y de generar oportunidades en cuanto a lo que es la mitigación”.
Es en esta línea, presentaron un proyecto de gestión integral para generar un plan reducción de los efectos del cambio climático. “En los fundamentos que realizamos con nuestro equipo, planteamos la necesidad de medir con un estudio técnico específico cuáles son las emisiones que generamos en nuestra provincia y cuáles son los efectos que estamos sufriendo del cambio climático. Y basándonos en eso, realizar proyecciones y elaborar un plan de adaptación y mitigación al cambio climático”.
Península Mitre tiene un rol clave para garantizar la continuidad de estos servicios ambientales que permiten combatir los efectos del cambio climático.
La adhesión a la Ley Yolanda recientemente, establece la capacitación a los funcionarios y funcionarias públicas en cuestiones de cambio climático y de desarrollo sostenible. Esta dinámica se viene aplicando a distintos talleres de educación ambiental formal y no formal, en escuelas y barrios. “Creemos que ese es un gran aporte que podemos hacer y que lo venimos haciendo desde hace muchísimos años”.
Colazo enfatizó en que “tenemos muchísimas iniciativas que no solamente abarcan la cuestión de la conservación, sino también lo vinculado al programa de empleos verdes, soberanía alimentaria y producción agroecológica. Estamos articulando con muchísimas personas e instituciones que necesitan de leyes y programas de políticas públicas para promover y profundizar este esquema de desarrollo que es muy incipiente, esta mirada de la sustentabilidad y que sin duda creemos que es lo mejor para Tierra del Fuego en base a su gente, a sus recursos y a su potencial”.
“Entendemos que el destino de Tierra del Fuego debe distinguirse como una provincia que conserve sus aguas, sus bosques prístinos y estamos fuertemente trabajando para eso”.
Daniella Mancilla Provoste
Fotos: Joel Reyero