Es la primera condena que recibe el ex ministro. Lo encontraron culpable de fraude al Estado, pero fue absuelto por el estrago. Nunca más podrá ejercer cargos públicos.
En la Sala AMIA de los Tribunales de Comodoro Py se dictó ayer la primera sentencia contra Julio De Vido. Desde el Penal de Marcos Paz, donde está preso por corrupción, el ex ministro escuchó la decisión del Tribunal Oral Federal 4 (TOF 4) que tuvo a cargo el juicio por la Tragedia de Once y lo condenó a 5 años y 8 meses de cárcel e inhabilitación especial perpetua para ocupar cargos públicos. Lo culparon de ser partícipe necesario del delito de fraude a la administración pública en el mantenimiento del servicio público de pasajeros ferroviario. En tanto, fue absuelto por la acusación de estrago culposo, ya que no lo encontraron responsable de las 52 muertes del siniestro del 22 de febrero de 2012.
Julio De Vido se encuentra está detenido con prisión preventiva en otra causa. Para que en este expediente se haga efectiva el Congreso nuevamente deberá desaforarlo como solicitó el Tribunal Oral Federal 4 en su sentencia.
La lectura de la sentencia incluyó la absolución de todas las acusaciones que recaían sobre el ex titular de la Unidad de Renegociación y Análisis de Contratos de Servicios Públicos (Uniren), Gustavo Simeonoff.
Con esta sentencia, el Tribunal integrado por los jueces Pablo Bertuzzi, Néstor Costabel, María Gabriela López Iñíguez y Ana María D’Ale, le atribuyó a De Vido una responsabilidad inferior a la que el TOF 2 -que realizó el primer juicio por el siniestro ferroviario-, le adjudicó a los ex secretarios de Transporte Ricardo Jaime (7 años) y Juan Pablo Schiavi (5 años y medio), quienes sí fueron condenados por estrago culposo además de la administración fraudulenta.