Impulsado por la Universidad de Magallanes y en alianza con Finlandia, Chile se posiciona a la vanguardia de la energía renovable en Latinoamérica. Con proyectos innovadores y una fuerte apuesta por el hidrógeno verde, la región de Magallanes se destaca como un eje central en la búsqueda de sostenibilidad y carbono-neutralidad para 2050.
Desde la creación del Centro de Estudios del Recurso Energético (CERE) en 1992, la UMAG ha impulsado la investigación y el desarrollo en energías renovables. Las mediciones del recurso viento realizadas por el CERE fueron fundamentales para la decisión de construir el primer parque eólico en la región, dando como resultado la inauguración del Parque Eólico Cabo Negro en 2010.
En este contexto, la Universidad de Magallanes (UMAG) ha sido un pilar clave en la innovación energética y en los últimos años, testigo y parte activa de una colaboración sin precedentes entre el Gobierno Regional de Magallanes y la Antártica Chilena y el Gobierno Regional de Ostrobothnia, Finlandia. Esta alianza, iniciada con el objetivo de fomentar el conocimiento y la cooperación entre las regiones, ha dado lugar a una serie de proyectos y actividades que están comenzando a dar frutos tangibles y prometedores.
Todo comenzó con un fondo destinado a facilitar el encuentro entre departamentos de fomento de cada región, con el propósito de gatillar una colaboración operativa más allá de los confines gubernamentales. El doctor Sergio Ríos Contesse, académico del Departamento de Ingeniería Mecánica de la UMAG, cuenta que “mediante el programa europeo de Cooperación Urbana y Regional Internacional (IURC), se adjudicó un proyecto entre el gobierno regional de Ostrobothnia, Finlandia y el gobierno regional de Magallanes, hace unos tres años, que abrió muchas puertas para futuros desarrollos en ambas regiones”.
Este intercambio inicial dio lugar al proyecto WHISPER, formulado colaborativamente entre la Universidad de Magallanes y la Universidad de Ciencias Aplicadas NOVIA (Nova Via, nuevo camino en latín), de la región de Ostrobothnia, y financiado por la agencia Team Finland, cuyo propósito es fortalecer el trabajo internacional de ambas universidades en el área de las energías renovables, apoyándose mutuamente. Tal es así que en enero, el rector de la Universidad de Ciencias Aplicadas NOVIA llegó hasta Punta Arenas, con una comitiva de la universidad, para firmar un convenio de cooperación con la Universidad de Magallanes. Tal es la fortaleza del vínculo desarrollado, que el rector de la Universidad de Ciencias Aplicadas NOVIA, Dr. Örjan Andersson, ha sido establecido como el primer cónsul honorario de Chile en Vaasa, con jurisdicción en las provincias de Ostrobotnia, Ostrobotnia Central y Ostrobotnia del Sur.
Dentro del mismo proyecto, los académicos de la UMAG Dr. Humberto Vidal Gutiérrez, director del CERE, y Sergio Ríos C. visitaron Finlandia en marzo, donde fueron recibidos por la Embajadora de Chile en Helsinki, señora Belén Sapag Muñoz de la Peña, quien resaltó la importancia de la colaboración entre ambas universidades, para fortalecer la participación de los respectivos países en la cadena de valor del hidrógeno y las energías renovables. Los académicos participaron en la prestigiosa feria de energías renovables Vaasa Energy Week, generaron vínculos con varios actores de la región de Ostrobothnia, dentro y fuera del ámbito académico, incluyendo a potentes representantes del sector industrial y tecnológico como la empresa Wärtsilä, un líder indiscutible en el desarrollo de motores a amoníaco y más recientemente a hidrógeno.
Una tercera actividad del proyecto WHISPER es la creación de un curso conjunto sobre energía renovable, específicamente centrado en los contextos de Ostrobotnia y Magallanes, que se desarrollará a partir de octubre. Este curso utilizará la tecnología de streaming para conectar a los estudiantes y profesores de ambas universidades. “Será un curso enteramente dictado en inglés, con un componente de intercambio cultural sumamente beneficioso para los estudiantes”, explica Ríos, destacando el desafío y la oportunidad que esto representa para ambas instituciones.
En reuniones con la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) y el Gobierno Regional, se destacó el programa “Transforma Regional Hidrógeno Verde Magallanes” y el potencial de colaboración en el proyecto de Finlandia.
Pero la colaboración no se detiene ahí. Cuatro regiones de Finlandia, entre las que se encuentra Ostrobothnia, han presentado la ambiciosa postulación “BotH2nia Hydrogen Valley”, a un fondo europeo, buscando 20 millones de euros para financiar estudios destinados a la creación de un “valle de hidrógeno”. Este innovador proyecto implica la integración y coordinación de diversas líneas productivas y de negocio relacionadas con el hidrógeno, a través de cuatro regiones de Finlandia. “Una colaboración inter-regional de esa escala, es admirable”, comenta Ríos.
El valle de hidrógeno no solo representa una oportunidad para el desarrollo tecnológico y económico, sino también para la sostenibilidad ambiental. El proyecto abarca desde la producción de equipamiento y toda la cadena de valor, hasta el uso final de la energía, pasando por varios recursos renovables, especialmente el hidrógeno.
La próxima semana se realizará la visita de una comitiva de estudiantes de ingeniería de la Universidad de Louisiana, en Lafayette, Estados Unidos, en el marco de otro proyecto de internacionalización organizado por el CERE y financiado por el programa La Fuerza de los 100.000, del país del norte.
Ríos señaló que “la participación activa de la Universidad de Magallanes en proyectos innovadores y sostenibles, no solo refuerza su papel como líder en investigación y desarrollo de energías renovables, sino que también fortalece las relaciones internacionales y el intercambio de conocimientos. Además, estas colaboraciones están enriqueciendo la experiencia educativa de los estudiantes, ofreciendo oportunidades únicas de aprendizaje en un entorno internacional. Mirando hacia el futuro, se espera que esta asociación continúe creciendo, con planes de expansión en investigación y desarrollo, que podrían tener repercusiones socioeconómicas positivas en las comunidades locales. Es un emocionante paso hacia delante, en la construcción de un futuro más sostenible”.
La participación activa de la UMAG en proyectos innovadores y sostenibles no solo refuerza su papel como líder en investigación y desarrollo de energías renovables, sino que también fortalece las relaciones internacionales y el intercambio de conocimientos.
Daniella Mancilla Provoste