El titular de la Sociedad del Estado Río Grande Activa, Juan Pablo Deluca, destacó la relevancia geopolítica de Tierra del Fuego y la necesidad de mantener políticas públicas orientadas al desarrollo del territorio.
A pocos días de que la Ley 19.640, que instauró el régimen de promoción industrial en Tierra del Fuego, cumpla 53 años de vigencia, Deluca remarcó su valor como una herramienta clave para afianzar la soberanía en el extremo austral de la Argentina. “¿Sabés cuál es el activo más importante que se logró a partir de la promoción? El pueblo fueguino. El pueblo fueguino instalado en la isla grande como una identidad centrada en trabajo y soberanía”, señaló.
“Esto es inédito para una política pública de Argentina. Es una política de Estado y no hay que mirarla de forma individual. Hay que mirarla con la causa Malvinas y con el proyecto de Argentina Bicontinental. Sin Tierra del Fuego, Antártida, Islas del Atlántico Sur, no hay un proyecto de Argentina Bicontinental. Eso hay que tenerlo muy en claro”, remarcó Deluca.
Economista especializado en desarrollo local y recientemente doctorado, Deluca vinculó su trayectoria académica y política a la promoción del desarrollo en el sur del país. “Es un tema que vengo trabajando desde toda mi vida. […] Siempre mi tema, en lo académico y en lo político, fue la economía política fueguina y la promoción”, señaló.
Desde una perspectiva integral, el titular de Río Grande Activa cuestionó la visión estrictamente economicista que asocia el régimen fueguino solo a cifras fiscales. “Está muy presente también este discurso ahora con el Gobierno Nacional. El presidente Javier Milei, cuando da sus conferencias, presenta una línea muy economicista desde los números, desde la economía pura y dura, matemática”, observó.
Frente a eso, Deluca propuso incorporar también la dimensión geográfica para comprender la lógica de las políticas aplicadas en el extremo austral. “Cuando se habla de economía política en Tierra del Fuego yo incorporo algo que es una tercera disciplina, que es la geografía. No podemos entender las fábricas de Tierra del Fuego si no entendemos que están en un territorio estratégico y periférico como es Tierra del Fuego”, explicó.
Esa mirada geográfica implica incluir no solo la isla grande, sino también el Atlántico Sur y la Antártida: “No aparece solo la isla grande como provincia, sino también el Atlántico Sur, donde están nuestras Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, y la proyección antártica. Es decir, una provincia con tres regiones”.
Sobre la relación con la Antártida, destacó el carácter estratégico de Ushuaia como puerta de entrada al continente blanco. “La ciudad se construyó con otro tipo de promociones. Primero el penal, siempre pensando en lo estratégico del territorio. […] Hoy la Antártida es valor presente”, indicó.
Deluca también se refirió al complejo escenario geopolítico de la región: “¿En qué otra provincia hay parte de su territorio ocupado? ¿Qué otra provincia tiene límites con un país vecino de esta forma, o posee un conjunto de archipiélagos y bases antárticas de alrededor de 30 países? Dentro del territorio fueguino hay bases de Ucrania, Corea, Brasil, Perú, Rusia, España. Eso sucede: ese es nuestro espacio”.
Por último, hizo hincapié en el resultado social del régimen de promoción: “¿Sabés cuál es el activo más importante que se logró a partir de la promoción? El pueblo fueguino. El pueblo fueguino instalado en la isla grande como una identidad centrada en trabajo y soberanía. […] Efectivamente cumplimos un rol. La gran mayoría de los fueguinos lo siente así: viviendo acá, pensando un hogar para toda su vida, está cumpliendo un rol para la Argentina”.
Con información de 19640noticias.com
