La compañía aérea británica Virgin Atlantic inició el primer vuelo del mundo que partió desde el aeropuerto de Heathrow en Londres a la terminal JFK de Nueva York, propulsado íntegramente con combustible 100% ecológico (SAF).
El vuelo, denominado “Flight100” y que despegó a las 11.30 de la mañana hora local, se realiza en un Boeing 787 equipado con motores Rolls-Royce Trent 1000, demostrando que el SAF es un sustituto seguro y viable a medio plazo para los combustibles derivados de fósiles en la aviación de larga distancia, informó la compañía en un comunicado.
Cómo se produce este combustible ecológico
El SAF utilizado en el vuelo es una mezcla dual única compuesta por un 88% de ésteres y ácidos grasos hidroprocesados (HEFA) suministrado por AirBP, la división de aviación especializada de la británica BP, y un 12% de querosén aromático sintético (SAK) proporcionado por Virent, filial de Marathon Petroleum Corporation.
El HEFA se produce a partir de grasas residuales, mientras que el SAK proviene de azúcares vegetales, asegurando que el combustible sea sostenible y compatible con los motores actuales.
El vuelo no sólo destaca la viabilidad del SAF como reemplazo de combustibles fósiles, sino que también subraya la importancia de aumentar la producción y la inversión en la industria del SAF para alcanzar los objetivos de Net Zero 2050.
“Flight100 demuestra que el combustible de aviación sostenible se puede utilizar como un reemplazo seguro y directo del combustible para aviones de origen fósil y es la única solución viable para descarbonizar la aviación de larga distancia”, afirmó Shai Weiss, CEO de Virgin Atlantic.
También destacó la necesidad de una mayor inversión y certidumbre regulatoria para impulsar la producción de SAF.
El ministro de Transporte, Mark Harper, elogió el vuelo histórico, destacando cómo el uso del combustible de aviación 100% sostenible puede contribuir a la descarbonización del transporte y permitir que los pasajeros sigan volando de manera sostenible.
Los datos y la investigación se compartirán con la industria para mejorar la comprensión científica de los efectos del SAF en las emisiones, según se informó.
Fuente: Noticias Ambientales