A pesar de haber fracasado en su intento de expulsar a Venezuela del Mercosur, el Gobierno recrudeció su embestida contra el gobierno de Nicolás Maduro. El presidente Mauricio Macri pidió esta vez que “se suspenda definitivamente” a ese país del bloque regional -cuyos cancilleres se reunirán el sábado para consensuar una declaración conjunta- y diputadas de Cambiemos enviaron una carta a la ONU solicitando su intervención para restablecer la paz en el país caribeño, que posee una de las mayores reservas de petróleo del mundo.
Durante una entrevista radial, Macri reiteró que en Venezuela “se violan sistemáticamente los derechos humanos”, insistió con que el gobierno bolivariano “dejó de ser una democracia” y consideró que lo que allí ocurre “es inaceptable”. “La están pasando muy mal, la vida de los ciudadanos ha perdido valor”, agregó el mandatario.
Dos semanas de la cumbre del Mercosur en Mendoza, los cancilleres de los países miembro convocaron a una reunión de urgencia para el próximo sábado en Brasil, oportunidad en que “sí o sí se tomará una decisión”, tal como anticipó el canciller de Paraguay, Eladio Loizaga. “No hay vuelta que dar. No hay marcha atrás”, advirtió el diplomático, quien además consideró que la conformación de la Asamblea Constituyente elegida el domingo pasado, sin la participación de la oposición, supuso “una ruptura del orden democrático”.