El 25 de agosto de 1609, hace 411 años, Galileo Galilei presentó su primer telescopio al Senado de Venecia.

Ese telescopio permitió al físico italiano, Galileo Galilei, convertirse en el padre de la astronomía moderna.

Galileo vio que el Sol, considerado hasta entonces símbolo de perfección, tenía manchas. El astrónomo realizó observaciones directas de la estrella, aprovechando cuando las nubes se interponían al disco solar, o en las mañanas y atardeceres, cuando la intensidad luminosa era más soportable, una práctica que le dejó totalmente ciego al final de su vida.

También vio que la Luna tampoco era perfecta, sino que tenía montañas y cráteres.

Notó que Saturno tenía unos apéndices extraños, que más adelante se vería que eran anillos.

Su militancia científica le valió la persecución y la condena de la Iglesia Católica, y Galileo Galilei murió preso y ciego, cerca de Florencia, en 1642.

Tuvo que renegar de sus ideas, pero nadie pudo quitarle el título de padre de la astronomía moderna, por abrir los ojos de la humanidad a un nuevo universo.

Deja tu comentario