Efectuó tareas logísticas en las bases antárticas Esperanza, Petrel y Carlini. Además, replegó al personal que se encontraba realizando estudios científicos.
El rompehielos ARA “Almirante Irízar” arribó a la ciudad de Ushuaia luego de haber culminado sus actividades logísticas en el continente blanco, en el marco de la última etapa de la Campaña Antártica de Verano 2023/24.
Durante más de 10 días, y bajo condiciones climáticas características de esta estación, la unidad tuvo que adecuar permanentemente el cronograma de actividades preestablecidas para llevar a cabo el reabastecimiento de las Bases Antárticas Conjuntas Esperanza, Petrel y la Base Antártica Científica Carlini.
Debido a las variantes climáticas que presenta la Antártida en esta época del año, el rompehielos tuvo que realizar movimientos constantes entre las bases para agilizar el abastecimiento, aprovechando las ventanas climáticas en cada sector para operar bajo las extremas condiciones que se presentan y así cumplir con su misión.
La operación incluyó actuar varias veces en el sector conocido como Punta Foca en la Bahía Esperanza, donde se encuentra ubicada desde 1952 la Base Antártica Conjunta Esperanza. Durante este periodo se utilizaron las embarcaciones de desembarco de personal y vehículos (EDPV) y al Grupo Playa, encargado de transportar el material desde la costa hasta la base.
En la Base Antártica Conjunta Petrel, situada en la isla Dundee, tuvo que fondear lejos de la costa debido a la presencia de gran cantidad de hielo, lo que imposibilitó el uso de lanchas EDPV para el desembarco de material. Los helicópteros Sea King, del Grupo Aeronaval Embarcado, jugaron un papel crucial en el transporte de los depósitos tubulares de combustible conocidos como “rollings”, facilitando además el abastecimiento de víveres y materiales necesarios para la invernada.
El trabajo coordinado entre el rompehielos y los helicópteros permitió completar con éxito la descarga de los barriles de combustible y de todo el material necesario para el suministro anual.
Finalmente, se aprovisionó a la dotación de la Base Antártica Científica Carlini con víveres secos y congelados, material de construcción y carga general, previo al inicio del esperado invierno en el continente antártico.
Los esfuerzos apuntaron a finalizar el desembarco de combustible, continuar con el repliegue de los residuos anuales, así como el despliegue de científicos que deben desarrollar sus proyectos en la base. Una vez más, el personal del Grupo Playa y las lanchas EDPV desempeñaron un papel crucial en estas operaciones.
A pesar de los obstáculos naturales, la unidad naval cumplió con su misión de manera eficiente y efectiva, garantizando el abastecimiento necesario para las bases argentinas en esa región tan inhóspita del planeta.
Con la satisfacción del deber cumplido, el rompehielos “Almirante Irízar” puso rumbo a la ciudad de Ushuaia, donde descargará todos los residuos antárticos para su posterior tratamiento, antes de dirigirse a Buenos Aires, donde dará oficialmente por concluida la Campaña Antártica de Verano 2023/24.
Fuente: argentina.gob.ar