El 1ro. de mayo de 1886, hace 134 años, fueron ejecutados en Estados Unidos los trabajadores que pasaron a la historia como los “Mártires de Chicago”.
En 1889, la Segunda Internacional de Trabajadores instituyó esta fecha como el Día Internacional del Trabajador para honrar la memoria de ese grupo de sindicalistas y socialistas revolucionarios que fueron ejecutados por realizar un reclamo laboral.
Producto de aquellas movilizaciones, los trabajadores consiguieron una ley para reducir la jornada de trabajo a 8 horas (se llegaba a trabajar hasta 16 horas por día).
El 1ro. de mayo, en la fábrica Mc. Cormik, de Chicago, no se reconoció la victoria de los trabajadores y la policía disparó contra los trabajadores que pedían por el nuevo acuerdo. Durante varios días siguieron matando obreros, hasta el 4, que una bomba estalló contra los uniformados. La policía respondió con más disparos. 38 obreros perdieron la vida y 115 fueron heridos.
