6o minutos que se convirtieron en casi 120. La entrevista a la expresidenta y candidata a Senadora por la Provincia de Buenos Aires Cristina Fernández de Kirchner en Infobae de la mano de Luis Novaresio fue una de las más importantes en materia política en los últimos meses. Destacable desde varios puntos, el hielo que la separó de ciertos medios se quebró finalmente de cara a las generales de octubre.
Apenas un minuto después de lo anunciado, las redes sociales, los canales de Infobae en YouTube, Facebook y Twitter y el live del mismo sitio a unísono comenzaban la trasmisión de la entrevista a Cristina Fernández de Kirchner. Desde la redacción de una de las webs de noticias más importantes de la región y frente a uno de los periodistas más críticos durante su gestión, la ahora candidata utilizaba sus primeros minutos de charla para pedirle a su entrevistado que la trate de “Cristina”, y explicar las motivaciones de su decisión de hablar en ese lugar.
Con un marcado acento en la coyuntura, poca auto crítica y cuestionamientos a cada pregunta de su interlocutor, la ex mandataria respondió a cada uno de los cuestionamientos que el periodista Novaresio había acumulado a lo largo de los años en los que ejerciendo la presidenta, Cristina negó el dialogo con la prensa local. Desde la muerte de Nisman, hasta la molestia por el uso indiscriminado de la Cadena Nacional, no hubo punto al que la ahora candidata no respondiera. Pidió disculpas en más de una ocasión por diferentes cuestiones que se habían criticado tras su salida de la Casa Rosada y sin dejar de desviar el foco de la coyuntura económica y política de la Argentina.
Dispuesta al dialogo
“Hay que hacer un dialogo público, nacional. Y significar cuál es el país que queremos -planteó Cristina Fernández a su interolcutor-. Que pasa lo que pasa con Santiago Maldonado y hay quienes creen que es un ataque al Gobierno, no se puede seguir viviendo así. La gente tiene que conocer el dialogo entre los dirigentes. Yo estoy dispuesta a hacer ese diálogo”.
En este marco, Cristina se refirió al episodio del traspaso de mando y remarcó que “yo sostenía y sigo sosteniendo que debía ponerle la banda en el Congreso cuando el Presidente dirige el mensaje al país”. Explicó que el mandatario obtenía su carácter de Presidente al momento de jurar frente a la Asamblea Legislativa.
“Yo hablé con él, ‘voy y te pongo la banda en el Congreso’. Para mí era eso, y sigue siendo eso. Él me dijo que si y después no sé que pasó que volvió con la idea que yo tenía que ir a la tarde a la Casa de Gobierno. No podía hacerle entender que a la tarde yo había dejado de ser la Presidenta”, describió.
“Si alguien se ofendió, si el presidente se ofendió, pido disculpas. Pido disculpas, si él pensó que tenía que ir a la tarde cuando ya no era presidenta, pido disculpas. Pero no podemos seguir discutiendo las formas y no discutir lo que está pasando. En serio que la situación económica es grave”, apuntó.
Cercana al discurso de sus candidatos, mencionó que “el gobierno está preparando un ajuste para después de las elecciones que va a ser fatal. Pero no únicamente para la gente, va a ser fatal para el propio gobierno” y aseguró tener “mucho temor que con el espíritu este de que nadie puede decir nada. Esto de invalidar al que no piensa diferente es malo en serio, es malo para el que lo hace, y malo para el que lo sufre”.
Dueño y Militante
– Gente que toda la vida ha sido dueña, toda la vida, porque bueno la vida lo colocó ahí como empresario…
– El caso suyo también.
– No, no, yo he sido toda la vida una militante política.
– Pero empresaria también es.
– No, he sido una militante política. Por favor. A Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César.
La aclaración de la ex mandataria surge luego de dar explicaciones sobre su crecimiento patrimonial.
Recordó que el diario La Nación había escrito una editorial donde contaba que “Néstor antes de asumir como intendente -que fue su primer cargo público- tenía más de 23 propiedades”, detalló que de su trabajo en el ámbito privado se ha dedicado a la adquisición de propiedades, a la locación de las propiedades y plazo fijo.
“La evaluación del patrimonio ya fue evaluada y fue juzgada judicialmente. Fue juzgado y evaluado por los peritos de la Corte, no por cualquiera” describió, y focalizó en los cuestionamientos a la dirigencia actual asegurando que “a mí nadie me descubrió una cuenta de repente en Panama Papers, ni me descubrieron cosa que yo no hubiera declarado”, señaló.
Los bolsos de la bronca
Uno de los momentos más destacados de la entrevista fue la pregunta respecto de la aparición del video de José López -segundo de Julio De Vido-, escondiendo bolsos con millones de dólares en un convento.
Dijo Cristina: “Fue una cosa muy fuerte. Yo estaba en Calafate. Cuando vinieron a decirme no alcanzaba a comprender la escena. Me parecía brutal. No entendía lo que había pasado. Tuve una gran indignación y un gran enojo. Me vino una gran tristeza y angustia. Pensé, más que en el proyecto político y en la imagen de nuestro gobierno, en los miles de pibes que habíamos incorporado a la política. Cómo se podían sentir con esa escena”.
Fue el momento en que se quebró. Hizo un silencio, pidió un poco de agua, y prosiguió: “hasta el día de hoy quiero saber cuándo y quién le entregó ese dinero (a José López). Porque me cuesta creer que todavía frente a fajos de dinero termo sellados, numerados y que se pueden identificar, la Justicia no haya podido determinar quién se los dio y cuando se los dio”
“Lo odie a José López como pocas cosas he odiado en mi vida”, dijo Cristina con una molestia evidente. Ante la consulta de si estaba al tanto de los movimientos de sus funcionarios, tanto como de Julio De Vido como de José López, cuestionó “¿A vos te parece que yo puedo saber qué pasa con cada funcionario? Es imposible saber qué pasa con cada funcionario. El que diga lo contrario, está mintiendo”.
Te agradezco que me lo preguntes
López, De Vido, la intervención al INDEC, Milani, los piquetes, Hotesur; la lista de temas es interminable. Visiblemente incómoda en reiteradas ocasiones, Cristina rebatía las preguntas de Novaresio y las decoraba con un agradecimiento intenso y forzado a las preguntas más duras que hacía el periodista. “Tenés la visión muy sesgada, Luis” aducía en momentos para luego referenciar la pregunta con la situación económica actual, o los cuestionamientos hacia la gestión de Macri. Ambos destacaron finalmente la posibilidad del diálogo.
“En mi gobierno hubo libertad absoluta. Se podía pegar afiches contra un periodista o se podía poner que yo era yegua, puta y montonera”, señaló la mandataria cuando se preguntó sobre su relación con los medios y el rol de los programas oficialistas de la época.
Aplaudible para algunos, indignante para otros. Cristina no dejó pregunta sin responder. A su manera, con un claro mensaje de campaña de cara a las generales de octubre.
Sin dudas, el periodismo político en Argentina y la región vivió uno de los momentos más importantes de su historia reciente lejos de los canales tradicionales. La televisión, la radio, los medios gráficos. Todos tuvieron que entrar en alguna de las redes del gigante Infobae para seguir el minuto a minuto de una de las entrevistas más importantes del momento.
Pablo Riffo
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