En comunicación telefónica con el programa del periodista Gustavo Sylvestre, que se emite de 6 a 9 de la mañana por Radio 10, el Diputado Nacional y Secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica afirmó que el acuerdo al que arribaron como gremio fue producto de “una extorsión del gobierno nacional”.
Martínez inició su alocución afirmando que quería “denunciar, como lo estamos haciendo en estos días, que los trabajadores metalúrgicos de Tierra del Fuego hemos sido victimas de una extorsión por parte la política del gobierno nacional en su ambición de modificar las actuales condiciones y en eso quitarle la protección arancelaria a la producción de Tierra del Fuego y como consecuencia de ello poner en riesgo los más de 10 mil puestos de trabajo en nuestro sector, directo, y que suma un número similar de indirectos”.
“Alrededor del 60% del empleo privado tiene ese origen y esta fuente de ocupación. Esta situación nos llevó a analizar en el conjunto de nuestra organización y con los trabajadores en asambleas, con el congreso de delegados, situación que empezó a darse hace 10 días y que nos ha llevado a buscar alternativas”, agregó.
Según el secretario general de UOM Tierra del Fuego “hemos sido presionados a cuestiones tales como la posibilidad incluso de la reducción del 30% de nuestros ingresos actuales. Nos hemos mantenidos muy firmes, unidos y solidarios, como es nuestra característica, pero con una enorme dificultad para poder modificar esto que ha anunciado el gobierno nacional y que ha sido aplaudido por muchos”.
“Lamentablemente, insistimos en manifestar que producto de esta extorsión hemos aceptado, en el debate intenso y profundo con nuestros compañeros, transitar esta alternativa para garantizar la continuidad de los puestos de trabajo”, asumió el dirigente.
Para el Diputado, “no hay muchas instancias en Tierra del Fuego, es una provincia muy alejada, somos una población de alrededor de 150 mil habitantes y se vería afectada de manera considerable, prácticamente condenados a expulsión”.
“Esto que es dificil, un trago amargo que nos toca afrontar, es tambien parte de la responsabilidad que hemos asumido, para defender todo lo que son nuestros derechos, defender la soberanía y seguir viviendo en la provincia de Tierra del Fuego”, sumó.
En el mismo sentido, Martínez destacó que “el anuncio del gobierno nacional de modificar las protecciones arancelarias que defendían la producción de Tierra del Fuego, llevarlas del 17 al 0% y permitir así el ingreso indiscriminado de la importación, hacía que la totalidad de los establecimientos fabriles de Río Grande tuvieran el riesgo de cerrar sus puertas ni bien terminadas las producciones”.
“Esto nos condenaba a la desocupación, a tener que abandonar Tierra del Fuego en muchos de los casos porque no hay alternativas laborales. No es una provincia que tiene la posibilidad de diversificar su producción, no hay trabajo, de hecho encabezamos los niveles de desocupación a nivel país; en nuestro sector solamente se han perdido 6mil puestos de trabajo de 2015 a esta fecha. No estábamos en las condiciones ideales para plantarnos y defender lo que teníamos”, apuntó el funcionario.
Consultado por la intervención de la gobernadora Bertone, el Diputado sostuvo que ésta “asumió en el último período y a raíz de estos anuncios cambió su actitud, pero venía siendo bastante obsecuente de la política del gobierno nacional, incluso ante los anuncios del presidente (Mauricio Macri) era una de las más fervientes animadoras, aceptando con movimientos afirmativos de su cabeza todo lo que anunciaba el presidente”.
“En esta circunstancia hizo una convocatoria amplia para tratar de defender los puestos de trabajo y ha accedido a algunas cuestiones que tienen que ver con la recaudación de la provincia, que obviamente va a afectar también en materia de derechos como salud, educación, servicios a la totalidad de los habitantes. (Rosana Bertone) también ha sido víctima de la presión, con otras carácterísticas”, indicó Martínez respecto del compromiso que también tuvo que asumir el gobierno fueguino.
Además, el dirigente fue consultado por el esfuerzo que deben asumir los trabajadores, que no se refleja del lado empresario, “sin dudas nuestro esfuerzo es importantísimo en una economía que sigue una carrera inflacionaria que el gobierno aún no puede detener, más allá de modificar permanentemente las tasas e intentar por diferentes vías, la realidad es que los productos, sobre todo de la canasta familiar, siguen modificándose permanentemente y eso trae consecuencias terribles sobre los sectores más vulnerables, fundamentalmente en el caso particular de los trabajadores en Tierra del Fuego”.
“El esfuerzo de los trabajadores en su conjunto no tiene precedentes, hemos atravesado en la provincia distintos momentos; es cierto tambien que durante los años ’90, producto de un plan de convertibilidad, fuimos condenados a no tener paritarias durante aproximadamente 10 años o más. Recién en 2004 recuperamos la posibilidad de acceder a un debate con el sector patronal para modificar nuestras condiciones salariales”, recordó.
Para Martínez “esto nos hace fuertes, nos convence de nuestro compromiso y responsabilidad con la defensa de ya no solo los puestos de trabajo y los derechos laborales, sino sobre todo de la soberanía en Tierra del Fuego, una provincia muy castigada que tiene dentro de su territorio a las Islas Malvinas, que para nosotros es un tema muy sentido”.
Finalmente, el representante de los metalúrgicos fueguinos fue interpelado sobre el resultado del acuerdo ya que dos años con los salarios congelados significaría, a la larga, una reducción de los ingresos, tras lo que confirmó que “todo lo que se estanca o no avanza, retrocede, como consecuencia de ello esto traería una pérdida importante del poder adquisitivo. Tendremos que tener la capacidad de ver, en cada una de las instancias, cómo nos recuperamos de este golpe durísimo que hemos tenido que asumir”.
“No hemos tenido alternativas, es como la vieja anécdota de un chiste en el que un prisionero era condenado a muerte salvo que aceptara ‘dunga dunga’, en este caso si se aceptaba la muerte también pretendían ‘dunga dunga’. Ha sido una extorsión a todas luces, con absoluta claridad de la que hemos sido objeto todos los habitantes de la provincia”, volvió a denunciar.
Y una vez más el diputado insistió que “queremos que quede absolutamente claro, no nos dejaron alternativa. Nosotros hemos debatido intensamente porque la realidad en Tierra del Fuego es muy distinta a la del resto del país por sus particularidades”.
“Cuando asumió este gobierno llevaron adelante una política muy particular que era censar a los trabajadores en cada uno de los establecimientos para analizar su nivel de arraigo, porque justamente estaban en juego estas decisiones, entonces consideraban que producto de estas políticas se iba a reducir considerablemente la población, muchos iban a volver a sus provincias de origen. Esto manifestado sin ningún tipo de cuidado por varios funcionarios con los que pudimos charlar al comienzo de sus gestiones, después directamente no nos recibieron más”, acusó.
Finalmente, Martínez manifestó que “esta situación que quizás nosotros conocemos más en profundidad por la tarea que nos toca, la veíamos venir. Hace dos años que venimos anunciado que esta situación se va a producir, que el gobierno nacional pretendía destruir la provincia de Tierra del Fuego a través de quitarle los beneficios a la industria, de privilegiar la importación, como hizo con las notebooks”.
María Fernanda Rossi