Miles de personas de todo el mundo se manifestaron este viernes en una nueva marcha mundial por el clima. La marcha global inaugura una semana completa de actividades para reclamar a los grupos políticos y sectores de poder del mundo que tomen las medidas necesarias para revertir el cambio climático global.

Inspirada por una joven sueca que, con tan solo 16 años, decidió llevar adelante una huelga estudiantil exigiendo al gobierno sueco que redujera las emisiones de carbono en base a lo establecido en el Acuerdo de París, la manifestación mundial ocurrida el pasado viernes es el puntapié inicial para una semana de actividades que se llevaran adelante en todo el mundo con el propósito de reclamar medidas urgentes para revertir la situación de crisis climática que enfrenta el planeta.

Greta Thunberg se ha convertido en una referente internacional para la juventud luego de haber saltado a la fama con sus acciones e intervenciones políticas contra el cambio climático y hoy lidera un movimiento global que moviliza a miles de personas alrededor de todo el mundo. La marcha del viernes fue un evento masivo que sucedió en simultaneo en cientos de ciudades de todos los continentes, convoca principalmente a jóvenes que expresan su preocupación y compromiso por generar un cambio necesario para el planeta. Jóvenes que han comprendido que la realidad que atravesamos solo puede modificarse con acción.

Cuando Greta faltó a la escuela durante más de 30 días, manifestándose diariamente frente al congreso de su país con un cartel que decía Skolstrejk för klimatet (huelga escolar por el clima), nunca imaginó que su iniciativa inspiraría a millones y que gracias a ella el calentamiento global hoy se encuentre en la agenda mediática y política de todo el planeta.

Desde el año pasado, los denominados “Viernes por el futuro” han ido creciendo y multiplicándose en todos los rincones del planeta. Se trata de manifestaciones regulares que poco a poco fueron calando en la sociedad. Planteando lemas como “No hay un planeta B”, la campaña está sensibilizando a las comunidades de diversos lugares del mundo, especialmente en Europa, lo que no es casual, ya que los principales emisores de los gases responsables del cambio climático son los países desarrollados y de ellos depende la toma de las decisiones necesarias para revertir la situación.

Con más de 5000 acciones convocadas en alrededor de 120 países, la jornada movilizó a millones de personas en todo el planeta. En Australia marcharon 300.000 personas; en las calles de Berlín se congregaron alrededor de 80.000; y en Bruselas fueron cerca de 15.000. En Bangladesh marcharon 3000 niños; en Kabul, la capital de Afganistán, un camión militar blindado protegía a un centenar de jóvenes encabezados por varias mujeres que portaban un cartel con la leyenda “Viernes por el Futuro” y en Tokio, cientos de estudiantes y activistas ambientales marcharon a través del distrito comercial de Shibuya con cánticos de “Justicia climática” y carteles que pedían “salvar a la Tierra” o que denunciaban que “la Tierra se incendia”.

En Latinoamérica el reclamo también tuvo su voz. Desde Ciudad de México hasta Buenos Aires, miles de jóvenes latinoamericanos han salido a la calle este viernes para sumarse a las protestas. México, con 65 marchas, lideró la representación más activa, seguido por Brasil con 48 y Colombia con 43. En Santiago de Chile, el principal punto de reunión ha sido Plaza Italia, pero otras 19 movilizaciones estaban programadas en todo el país trasandino. Nuestro país contó con 18 marchas en todo el territorio, pero a diferencia de otros lugares del mundo, la manifestación principal está programada para el día 27 de septiembre, en coincidencia con el Día Nacional de la Conciencia Ambiental.

El movimiento continúa creciendo, sumando participación en cada evento. Los “Viernes por el Futuro” de Greta Thumberg nos acercan un poco más al ideal de comunidad global unida, sin fronteras, reclamando por un bienestar colectivo con la mirada puesta en el futuro del mundo y de nuestras sociedades.

Abel Sberna

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