El “Mission 03 Antarctica” se convirtió en el auto eléctrico mas cómodo para el terreno antártico debido a que produce mayor ahorro, conducción más placentera y menos contaminación.
Se trata de una de las innovaciones más llamativas de la compañía “Venturi Automobiles”, que ha decidido crear un producto especialmente diseñado para su desempeño en terrenos en los que la mayoría de automóviles no tendría sentido. Para ello, se ha escogido la Antártida, uno de los espacios naturales en los que, por condiciones climatológicas únicas, la población no se ha asentado.
El “Mission 03 Antarctida” nació como un proyecto tras la visita del Príncipe Alberto II de Mónaco a la Antártida en el año 2009, se pensó que podría ser una buena idea la producción de un vehículo útil que contase con soluciones eléctricas de última generación. El frío, pese a que todos sabemos cómo puede influir en su rendimiento, no ha servido de excusa.
Posee una potencia total de 120 kW, lo cual supone una diferencia en torno a un 20% respecto del actual coche eléctrico más destacado del panorama internacional; el Tesla Model S en su versión más aspiracional. Aun así, debe tenerse en cuenta que estamos ante una opción que cuenta con un peso total que se sitúa sobre las 2 toneladas de peso.
El sello distintivo son las “orugas” que garantiza la circulación sobre la nieve y hielo gracias a la disposición de este ‘calzado’. El punto débil es su autonomía ya que dispone de un máximo de 45 kilómetros por ciclo completo de carga.
Sus 20 km/h de velocidad máxima, en condiciones lógicas de funcionamiento, según se puede leer en la página web de “Venturi Automobiles”, muestran a la perfección por qué estamos ante una solución diferencial. Es importante destacar que este proyecto está específicamente desarrollar para funcionar sin problemas a temperaturas que pueden llegar a rozar los 50 grados bajo cero.
Silvana Minué