Como un hecho histórico, sin precedentes y que no contaba con registro en las bitácoras, es considerado el reciente ejercicio realizado por personal de la patrulla de exploración y rescate O’Higgins, la que en conjunto con personal de la patrulla de rescate del Ejército argentino, ejecutaron las actividades en forma eficiente y coordinada al sur del refugio Ramón Cañas Montalva.

Es así que entre los días 19 y 20 de Agosto, y coincidente con el natalicio del patronímico de la Base CGL Bernardo O’Higgins Riquelme, se desarrolló en el sector general del Refugio Bonnen Rivera, en el lado oriental de la península antártica, y específicamente en el sector de Bahía Duse, distante a 44 kilómetros de la Base O´Higgins y a 38 de la Base Esperanza de Argentina, el Ejercicio conjunto denominado “PARACACH 2017” (Patrulla de Rescate Antártica combinada Argentina- Chilena).

Las actividades comenzaron muy temprano en la mañana del día sábado con el traslado del personal y medios de la Sección de Exploración y rescate O´Higgins al mando del May. Felipe Segovia Llanos, la que estuvo integrada por ocho hombres, siete motos y dos trineos con todos los medios y la logística necesaria para satisfacer las necesidades para el ejercicio, los que iniciaron la marcha a partir de las 08:50 desde la Base O´Higgins hacia el Refugio Bonnen Rivera.

El desplazamiento se ejecutó en un tiempo record para éste recorrido, ya que no presentó inconvenientes y bajo condiciones óptimas de visibilidad, consistencia de nieve, con vientos de 10 kt y temperaturas de menos veintidós grados Celsius, arribando al punto de término de marcha luego de dos horas y cuarenta minutos, los registros anteriores eran de cuatro horas.

El personal chileno llegó al sector del refugio Boonen Rivera, en donde se encontraron con los integrantes de la Patrulla Argentina, quienes habían llegado el día anterior a las 16:30 hrs. provenientes de Base Esperanza, con un tiempo de desplazamiento de dos horas.

Posterior a la llegada de la patrulla chilena y su aposentamiento, se llevó a cabo una reunión y de acuerdo al desarrollo previsto en la planificación, se puso en ejecución el ejercicio en forma inmediata a partir de las 13:00 hrs. aproximadamente, para aprovechar la ventana que presentaba el lugar para el desarrollo de las acciones.

Se establecieron tres núcleos de empleo, dejando una reserva en el Refugio Bonnen Rivera, otro en el sector del Refugio Ramón Cañas Montalva, lugar al que no se hacia reconocimiento desde el año 2010, según consta en la bitácora del refugio y que fue inagurado el año 1987 y el tercer nucleo ejecutando un rescate simulado 15 Kilómetros mas al Sur de éste último refugio en el sector denominado San Nicolás, es por ésta razón que cobra ribetes históricos, al ganar y reconocer terrenos más al sur de la península antártica a los cuales no se había accedido, las dificultades no estuvieron ausentes, debiendo realizar conducción por tres horas en condiciones de oscuridad, pero fueron sorteadas en buena forma y con acertadas resoluciones en el terreno, sumado a las complicaciones propias de la zona de empleo, las que muchas veces no obedecen a un programa definido en cuanto al día de su ejecución, sino más bien a la ventana atmosférica que se produce, la que en esta oportunidad fue durante los días de fin de semana, es necesario señalar además que los desplazamientos se efectuaron en motos de nieve de excelentes prestaciones sobre rutas de mar congelado.

Durante el ejercicio, ambas patrullas pusieron en práctica procedimientos aprendidos durante sus respectivos entrenamientos, homologando los procedimientos, el lenguaje, los conocimientos, el equipo técnico de montaña y de rescate en grietas, siendo abastecidos con un lanzamiento realizado por un Avión Twin Otter de la Fuerza Area Argentina con insumos médicos para la atención de los heridos, los que posteriormente fueron trasladados en trineos tractados con motos de nieve hacia el sector del refugio Boonen Rivera, en donde se solicitó la evacuación final del paciente poniendo fin a la simulación y al presente ejercicio.

Los puestos de mando, tanto de Chile como de Argentina, monitorearon en forma permanente la totalidad de las acciones con el resto del personal disponible en las bases, que dicho sea de paso, ante la salida de personal a terreno, deben seguir con su funcionamiento y régimen normal de trabajo, esto se efectuó entre otros con el sistema de rastreo satelital Delorme, el que permite en tiempo real y con un mínimo de desfase seguir todos los movimientos de la patrulla, así también se estableció puntos de control y enlace radial HF, VHF, y con teléfonos satelitales, los que se ejecutaron sin inconvenientes tanto con la Base Esperanza, Refugio Boonen Rivera, Refugio Ramón Cañas Montalva y la Base O´higgins.

El entrenamiento, que además estrechó lazos de amistad y camaradería entre soldados antárticos argentinos y chilenos, no se realizaba desde el año 2014, puso en evidencia las notables capacidades, el alto grado de conocimiento, la camaradería y el profesionalismo del personal y permitirá reaccionar ante algún requerimiento en el mínimo de tiempo y con el máximo grado de alistamiento, con los medios disponibles ante un eventual accidente en el área de responsabilidad asignada, así también deja ver las excelentes capacidades, competencias y conocimientos del personal que desarrolla actividades en el continente antártico y que posee la especialidad de montaña, los que además cuentan con equipo y medios de primera categoría para cumplir con los requerimientos impuestos por el mando, dando cumplimiento además a los acuerdos de la reunión bilateral del año pasado entre los Ejércitos de Chile y Argentina.

El personal retornó a sus respectivas bases el día domingo durante la mañana, debido a que en la tarde entraba un frente de mal tiempo que afectará toda la semana a gran parte de la península antártica y que considera vientos de hasta 200 k/h, estableciendo un nuevo registro para cubrir los 44 kilómetros que separan al refugio Boonen Rivera y el Refugio Rancagua en la Base O’Higgins con una hora y treinta y dos minutos.

El Comandante de la Base chilena Tcl. Rolando Maza Novoa, realizó un último enlace para verificar el estado y arribo del personal y los medios con el Jefe de la Base Esperanza May. Nel Albiero, pudiendo constatar que también llegaron sin novedad, dando por finalizado de ésta manera el ejercicio PARACACH 2017.

 

Fuente y créditos: Facebook Rolando Maza

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