El incremento de la moneda extranjera afectó los costos. Cuánto resta para su finalización un trabajo que abarcó 8.800 metros de cañerías que impedirá que el centro de Río Gallegos se inunde.

La obra avanza pese a los cimbronazos financieros que vive la Argentina y que se acentuaron luego del 11 de agosto, producto de una contundente medición de votos que dejó al gobierno nacional por debajo del Frente de Todos (quienes podrían asumir el 10 de diciembre las riendas del Estado si repiten los resultados de las urnas el 27 de octubre).
La Cuenca Sarmiento, la primera obra de infraestructura pluvio-cloacal que se realiza desde hace más de tres décadas en Río Gallegos, padece el incremento en los costos ya que los insumos se rigen a precio de esa moneda ambivalente llamada dólar. Fue presupuestada en 250 millones de pesos, tiempo pasado.
En diálogo exclusivo con EL ROMPEHIELOS, Paola De Gaetano, directora de Obras Públicas de la Municipalidad, lo explicó en tiempo presente. “Las bombas hoy cuestan 12 millones de pesos”, aclaró.
Existen dos marcas de bombas, la de mejor calidad, costaba el año pasado 5.500 dólares, hoy el precio se elevó a 7.800 (se necesitan dos). Otras dos bombas, de mayor tamaño, alcanzaron los 10.900 dólares.
Proalsa SRL continúa con las tareas, pero indudablemente los costos serán re determinados. “En el país, nos contó el auditor, todas las obras están paralizadas. De las 300 obras, 13 continúan, y la Cuenca es una de ellas”, marcó la funcionaria.
El cambio de gobierno provocará -como sucede en toda nueva gestión- la revisión de costos y control de los gastos. Esto podría demorar la fecha original de finalización, que es junio de 2020.
A inicios de julio, el intendente Roberto Giubetich confirmó, luego de reunirse con el Ministerio de interior, Rogelio Frigerio, que iba a iniciarse la segunda etapa de la Cuenca.
A la fecha, se lleva el 89% realizado. Durante la semana, auditores de Nación relevaron los números y las tareas de un trabajo que, cuando se finalice, impedirá que el centro de la capital santacruceña se inunde.
Antes de que termine el año se espera repavimentar las cuadras afectadas. En total se afectaron 8.800 metros de cañerías.
El objetivo -destacó De Getano- será repavimentar ocho cuadras por mes “como mínimo”. “De esta forma quedarían muy poquitas calles”, añadió. Sucede que el trabajo devengó en romper literalmente todas las cuadras afectadas para colocar los caños gigantes. Semanas atrás ansiaban llegar a 10 cuadras, pero las heladas interrumpieron las tareas que son todas a la intemperie.
Los tiempos corren, al igual que el dólar.
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