“Esto sienta un precedente muy importante. Es la primera vez que va a juicio, en la provincia, un caso de caza furtiva”, señaló el guardafauna y principal referente de Biodiversidad en la provincia, Fabián Llanos. Alertó además sobre los peligros en la venta y consumo de la carne de guanaco, por las enfermedades que puede transmitir y provocan serios problemas en la salud.

La ley provincial de Fauna Silvestre, que brinda protección y promueve la conservación, preservación de la fauna y sanciona a todos aquellos que no respeten la vida de nuestras especies autóctonas, las que habitan los suelos rionegrinos, tiene más de 30 largos años pero recién ahora se logra alcanzar un verdadero hito. Por primera vez, en Río Negro, llega una condena penal para los responsables de matar a un guanaco.

“Esto sienta un precedente muy importante. Es la primera vez que va a juicio, en la provincia, un caso de caza furtiva. Puede ser que es porque hay otra mirada desde el Ministerio Público Fiscal… porque la ley tiene 35 años”, afirmó Fabián Llanos, guardafauna y flamante subsecretario de Biodiversidad y Cambio Climático de Río Negro.

El caso salió a la luz en plena pandemia, agravada por la fase de estricto aislamiento obligatorio (ASPO) que regía en todo el país y por haber sido cometido por tres miembros de las fuerzas de seguridad. Dos de ellos, policías en actividad, y una mujer retirada de la fuerza.

Los tres fueron sancionados en la provincia con una multa administrativa de $80.000 cada uno.

Sin embargo, los referentes de Fauna destacaron la importancia de “que se llegue a una condena que sienta un precedente” ya que sirve para concientizar –se destacó- porque “promovemos la educación y capacitamos siempre a las fuerzas de seguridad”.

La población de guanacos, se estima, se ha visto reducida con el tiempo y su caza y faena lamentablemente se han convertido en moneda corriente.

“Estos casos, como éste donde había policías en actividad, ocurren todo el tiempo. Llegar a una condena es importante porque marca otra mirada hacia la cuestión ambiental. El fiscal de Estado ofició de querellante”.

La carne de esta especie suele ser comercializada hasta en las redes sociales, pero se advirtió que no sólo se trata de una actividad ilegal, sino de alto riesgo, porque el guanaco puede tener enfermedades zoonóticas que pueden poner en riesgo la salud de la población.

Los “cazadores”, responsables penales

En breve se espera conocer cuál será la pena que le impondrán los jueces, ya que las tres personas fueron declaradas responsables penales por el hecho ocurrido el 13 de septiembre de 2020, cuando en un control policial en Ruta 6 –en Paso Córdoba- se les detectaron piezas faenadas de guanaco.

En este caso se consideró como agravantes para los dos hombres y la mujer, que “faenaron al animal y lo escondieron en el baúl del auto, además escondieron las armas largas y los cuchillos en la camioneta que también se movilizaban. No sólo eso, sino que cazaron una especie que está prohibida por la ley de Fauna”.

Por ello es que para los dos hombres el representante del Ministerio Público Fiscal solicitó la pena de 2 años y 6 meses de prisión en suspenso, para la mujer la pena en suspenso por el término de 3 años, y para los tres la inhabilitación máxima de 10 años para cazar, más las costas del proceso y las accesorias legales.

Las tres personas fueron declaradas culpables de haber infringido la Ley de conservación de la fauna silvestre N°22.421, la Ley provincial N°2056 de fauna silvestre y la Resolución 041/2020 de la Secretaría de Ambiente, Desarrollo Sustentable y cambio Climático de la provincia de Río Negro.

“Creen que el guanaco es infinito… pero la principal comida es del puma, y si el puma se va quedando sin este recurso… es cuando vienen los problemas en los campos y para el ganado”, aseguró Llanos.

Además de haber violado la restricción de circulación que imperaba por la pandemia Covid-19.

La querella representada por la Fiscalía de Estado, adhirió al pedido de esta pena, y expresó que se determine junto a la pena una inhabilitación especial para trabajar en la policía por el tiempo que dure la condena.

Población en baja y con mayor riesgo

Si bien no hay datos concretos y certeros sobre la población animal autóctona, se estima que los niveles de fauna silvestre “vienen decreciendo” en forma paulatina.

Es por eso, según se adelantó, se prevé que en los meses venideros se pueda impulsar la contratación de consultores externos para realizar el primer censo poblacional en la región.

“Tenemos datos preliminares pero aún no se sabe a ciencia cierta. Claramente las manadas, en el caso de guanaco, que se suelen ver, están disminuidas. Se cree que existe el 10% desde tiempos previos a la conquista”, sostuvo Llanos.

La caza de guanaco está prohibida por Ley Nacional N° 22.421 y Ley Provincial N°2056. El guanaco es una de las especies más afectadas, porque tiene un importante volumen de carne que se aprovecha. Pero también se ven jaqueados por la caza ilegal, los ñandúes y choiques, y también las maras.

Peligros para la salud pública

En diversas localidades, como en Sierra Grande y áreas de la Región Sur “te venden en redes sociales, carne picada, milanesas… ambientalmente es un desastre”, destacó el guardafaunas, pero “también desde el punto de vista sanitario”, alertó.

No sólo porque se realizan las faenas en lugares no habilitados -fuera de la ley- y la comercialización también, sin tener en cuenta normas bromatológicas, sino porque además estas especies suelen poseer endoparásitos que pueden enfermar a las personas que consuman su carne.

Hay enfermedades zoonóticas que afectan al guanaco. Este tipo de parásito se lo denomina “sarcocystis guanicoe canis”. En general la carne con sarcocystis insuficientemente cocida genera en el organismo humano un cuadro de gastroenteritis con diarrea, cólicos y escalofríos.

Desde áreas de Zoonosis de localidades rionegrinas se emitió una alerta reciente, fue tras el hallazgo de abundantes quistes macroscópicos parecidos a un grano de arroz entre las fibras musculares del animal.

La sarcocystis es una enfermedad parasitaria que se conoce vulgarmente como triquina o arrocillo y constituye una zoonosis toxica, el consumo de carne infectada, cruda o insuficientemente cocida, en humanos puede producir una intoxicación severa, se explicó.

Fuente: General Roca Noticias

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