Mira, ¿no está escrito en este papiro? Lee, tú que descubrirás en los años futuros si Dios te ha dado el poder para leer. Leed, niños del futuro, y aprended los secretos de los mejores, que están tan lejos de vosotros y, en realidad, tan cerca. Los hombres no viven una vez, con el propósito de desvanecerse para siempre. Viven vidas diferentes en distintos lugares, pero no siempre en este mundo, y entre cada vida hay un velo de sombras. Las puertas, finalmente, se abrirán y veremos todos los lugares donde nuestros pies han pisado desde el amanecer de los tiempos. Nuestra religión nos enseña que vivimos para la eternidad. Así, ya que la eternidad no tiene fin, no puede tener principio. Es un círculo. (…)
fragmento de EL LIBRO EGIPCIO DE LOS MUERTOS, 1550 a.C.
