Argentina capturó, por faenar “ilegalmente”, un pesquero español que llevaba en sus bodegas 320 toneladas de piezas frescas de merluza, abadejo, calamar y raya, “evaluadas en una suma millonaria”.

Se trata del buque ‘Playa Pesmar Uno’, de 63 metros de eslora y 12,50 de manga, que llevaba 34 tripulantes a bordo en el momento de ser apresado en la Zona Económica Exclusiva Argentina (ZEEA) por el guardacostas “GC 27 Fique”, en las inmediaciones de Comodoro Rivadavia.

El pesquero interceptado, de bandera española, había partido de Montevideo, la capital de Uruguay, el pasado 11 de enero y fue detectado por la Prefectura Naval mientras faenaba “ilegalmente” en mar argentino.

El personal de Prefectura Naval estableció comunicaciones por radio con el capitán del pesquero, con el objeto de que detuviera su navegación y no levantara la red de pesca que tenía desplegada en el mar, a lo cual accedió.

“Con las fuerzas federales trabajamos para proteger los recursos que son de todos los argentinos”, aseguró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en un comunicado remitido en el que agregó que el Gobierno argentino va “seguir fortaleciendo” su presencia en las aguas “para brindar seguridad y para garantizar el cumplimiento de la ley”.

El capitán del barco ‘Playa Pesmar Uno’, con base en Marín (Pontevedra), asegura que “en todo momento” el buque “ha estado fuera de aguas argentinas”. El presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI), Javier Touza, ha señalado que la empresa propietaria del barco es “histórica”.

En lo tocante a los 34 tripulantes que lleva a bordo, la empresa le ha señalado que “se encuentran en buen estado”, “más allá de la inquietud e incertidumbre”, y que “la mayoría” son gallegos, incluido el capitán. Navegan escoltados por autoridades argentinas para tomar tierra en la región de Comodoro Rivadavia.

El ‘Playa Pesmar Uno’ asegura que se encontraba en la conocida como milla 201, cerca de Malvinas pero en aguas internacionales, “justo donde acaba la Zona Económica Exclusiva de Argentina”, en donde en este momento “están concentrados unos 400 buques”, principalmente de nacionalidad asiática.

En esta época del año “se encuentra una enorme concentración” de barcos pesqueros por la presencia de un cefalópodo llamado pota, parecido al calamar, que “es muy estacional”. Esta especie “es migratoria” y en estos días empieza a tomar más tamaño mientras “sale de aguas argentinas a aguas internacionales”, ha indicado Touza. De forma accesoria también se pescan especies como merluza o nototenia.

Así, “existe una gran tensión en la zona”, por lo que “las autoridades argentinas realizan un seguimiento muy próximo para vigilar que no se entre en sus aguas”.

En esta línea, Touza remarca que la caja azul del barco será clave en esta caso, ya que se trata de un sistema satelital que monotoriza en “cada momento” la posición del buque. Por ello, subraya que “las responsabilidades o no se verán en función de los datos que arroje la caja azul”.

EL Mundo

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